Natxo MATXIN
OSASUNA

Ejercicio defensivo para seguir siendo imbatibles a domicilio

Los rojillos rascaron un brillante punto del Santiago Bernabéu con una disposición táctica que apenas dejó espacios a su adversario.

R. MADRID 0

OSASUNA 0


Osasuna sigue imbatido fuera de casa gracias a un ejercicio defensivo descomunal en un feudo inasequible como suele ser el Santiago Bernabéu. Jagoba Arrasate sorprendió con un plan de partido procurando dejar los mínimos espacios a un Real Madrid que se atascó en ataques estáticos a los que está poco acostumbrado y los rojillos se trajeron un punto exquisito.

Saltó la escuadra navarra con tres centrales, una disposición táctica que le dio muy buen rédito en La Cerámica, y muy pendiente de no dejar el mínimo resquicio a un rival que se alimenta de los espacios y su velocidad para ocuparlos. Consecuentes con esa preocupación, los rojillos no presionaron arriba, sino que defendieron en propio campo, muy arropados, dejando la iniciativa con el balón a los merengues.

Dicha estrategia desesperó durante la primera mitad a un cuadro local que solo pudo correr en contadas ocasiones, justo cuando Osasuna cometió algún que otro error en las pocas veces en las que pudo circular la pelota en medio campo. En estático, el Real Madrid volcó sus esfuerzos ofensivos por el costado de un Vinicius vigilado de cerca por Nacho Vidal, que contó con Moncayola de apoyo para ejercer esa labor.

Así las cosas, solo cuando los visitantes perdieron el cuero de la medular hacia arriba llegaron las oportunidades merengues, con dos llegadas de Camavinga y Carvajal. El resto, intentonas desde fuera del área, la más peligrosa, con un misilazo de Militao al que respondió a dos manos Herrera. Por el lado navarro, la más clara la tuvo Kike García, que se encontró el esférico a la salida de un corner y le golpeó en el muslo para marcharse por encima del larguero.

Moncayola, al poste

Una de las claves del choque estuvo en lo que pudo ser y no fue. Imitando a su adversario, Osasuna pilló desprevenido a su anfitrión en una contra que inició Kike García, dio continuidad Chimy Ávila y casi culminó con acierto Moncayola. El de Garinoain no acabó de empalar del todo bien, lo que no impidió que la pelota se estrellase en el poste cuando ya había superado la estirada de Courtois, en el mejor lance para los rojillos.

Sin embargo, el que Ancelotti abriese todavía más el campo dando entrada tras el descanso a Rodrygo obligó a un mayor esfuerzo físico a los visitantes en el apartado defensivo. Aunque el peligro rondó los dominios de Herrera, los apuros se tradujeron, en todo caso, en poco más que un zurdazo de Benzema rozando la cruceta y otro remate forzado del arieta francés.

Con la entrada de Darko y Rubén García, Arrasate refrescó el equipo de cara al exigente rush final que aguardaba, ante un oponente que puso toda la carne en el asador. Osasuna se defendió con uñas y dientes ante las acometidas merengues e incluso David García dispuso de un cabezazo tras falta que no encontró portería. Al final, un punto que sabe de maravilla.