El juicio contra Ainhoa Larumbe por un incidente registrado ante el Parlamento de Nafarroa durante el Día Internacional de la Mujer de 2021 ha dado lugar a una condena basada solo en la declaración de un policía foral.

El tribunal ha descartado imponer los quince meses de cárcel que había reclamado la Fiscalía por «atentado contra la autoridad», pero ha condenado a Larumbe en concepto de «resistencia» a ocho meses de multa que suponen 2.400 euros.

Este caso ha tenido un amplio eco social, sobre todo tras difundirse un vídeo que acreditaba que el agente que denunció a Larumbe se había caído al suelo al tropezarse.

La procesada ya expuso, en una entrevista con NAIZ, su sensación de «desamparo ante la Justicia» al haber sido archivada, antes de este juicio, su denuncia contra la actuación de la Policía Foral.

«No fue tan pacífica»

Durante la vista, el foral siguió argumentando que había recibido una patada y el tribunal lo ha dado por bueno. Así, la sentencia recoge que, al llegar al lugar en que se realizaba la protesta feminista, Larumbe «se colocó en la zona más cercana a la pancarta, haciendo fuerza para permanecer en el lugar». Y cuando hubo un forcejeo, «sujetando unos y otros la pancarta, y encontrándose la señora Larumbe enfrente del policía 616, le golpeó a la altura de la espinilla».

En cuanto al vídeo citado, el tribunal indica que recoge un momento posterior: «Cuando dicho agente iba a retirar del grupo a la acusada para identificarla, se trabó, cayendo ambos al suelo».

Y afirma que la actitud de Larumbe «no fue tan calmada y pacífica como pretendió hacer ver en el acto de la vista oral».