GARA
BILBO

Nicholas Meyer: «Star Trek gusta tanto porque da esperanza»

Para Nicholas Meyer, autor de las mejores entregas de la saga de Star Trek, esta gusta a todo el mundo porque «ofrece la esperanza de que las personas de buena fe pueden lograr algo bueno». Meyer está en Bilbo, homenajeado por el Festival de Cine Fantástico Fant, que hoy clausura sus puertas. Escritor, guionista, productor y director, la suya es una personalidad que ha marcado el universo de la ciencia ficción y el imaginario del cine norteamericano.

Nicholas Meyer (Nueva York, 1945), director de dos de las mejores películas de la popular saga de ciencia ficción Star Treck (“Star Trek II: La ira de Khan”, 1982, la película que mucha gente aún considera la mejor de la franquicia; y “Star Trek VI: El país desconocido”, 1986) y coguionista de una más, así como de tres capítulos de la serie de televisión “Star Trek: Discovery” (2017), ha sido el gran homenajeado del Festival de Cine Fantástico de Bilbo. Meyer es ahora también la nueva Estrella del Fantástico –nombre del galardón que concede este certamen–, pero no solo por su relación con el universo audiovisual de Star Trek, sino por sus novelas sobre Sherlock Holmes y por haber dirigido para el cine títulos como “Los pasajeros del tiempo” (“Time After Time”, 1979). Basada en la novela “La máquina del tiempo”, de H. G. Wells, en esta película convirtió al novelista en personaje de ficción. Protagonizadas por Malcolm McDowell, Mary Steenburgen y David Warner, las aventuras de H. G. Wells persiguiendo a Jack el Destripador a través del tiempo se convirtieron en un éxito de taquilla.

En televisión fue también el artífice de una revolución: “El día después” (1983), para la cadena ABC, rompió los récords: nada menos de 100 millones de espectadores se engancharon a su primer pase. El tema era de actualidad candente, porque recreaba un hipotético ataque nuclear de la URSS a EEUU.

En Bilbo, ayer Meyer se mostró «orgulloso» de todos los trabajos en los que ha participado y sorprendido de que «después de que haya pasado tanto tiempo, la gente siga teniendo ganas de verlos y de que sean tan duraderos». Ese es, precisamente, uno de sus objetivos de siempre: «Me gusta pensar que las cosas en las que trabajo son concebidas con una idea de que van a durar y aguantar por lo menos a corto plazo». Respecto a la franquicia de Star Trek, Meyer, parafraseando al escritor ruso Leon Tolstói, aseguró que la saga, al igual que el arte, «enseña a amar la vida». Es autor también de varias novelas sobre Sherlock Holmes, el personaje creado por Arthur Conan Doyle, una de las cuales trasladó a la gran pantalla (“Elemental, Dr. Freud: solución al siete por ciento”, 1974).

De hecho, se considera a sí mismo un «contador de historias, un cuentacuentos», porque «da igual el formato en el que las cuentes, lo importante es que se trate de una buena historia», explicó.