LAB y ESK se concentraron ayer en la planta de Mercedes de Gasteiz y llamaron a la plantilla a secundar la huelga convocada para los sábados en los que se trabaje, como la jornada de hoy. «Desde hace ya muchos meses, la empresa está utilizando la flexibilidad de forma totalmente abusiva, activando todos los sábados para trabajar y luego, apenas dos días antes, los confirma o no», denunciaron en un comunicado.

Explicaron, así, que tras la confirmación de que hoy se trabaja ambos sindicatos se concentraron frente a la empresa y llamaron a parar hoy como forma de protesta contra el «uso abusivo» de la flexibilidad y para defender que «no podemos estar dependiendo de la empresa todos los sábados. Tiene que respetar las vidas de las trabajadoras y trabajadores de la fábrica de forma efectiva».

Subrayaron el derecho a tener «una vida digna, haciendo posible la conciliación y la corresponsabilidad», por lo que exigieron respeto a la plantilla, conformada por alrededor de 5.000 trabajadores.

«Exigimos también que se limite el uso de los sábados, tal y como se recoge en la plataforma sindical mayoritaria», manifestaron.

LAB y ESK recordaron que la dirección de la planta de Gasteiz impuso un ERTE de treinta días hasta finales de junio, «del que solo ha usado dos». Y le acusaron haber «bloqueado» la mesa de negociación del convenio y de pretender «ampliar aún más la flexibilidad, establecer un nuevo modelo de fin de semana de hasta dos horas discriminando aún más a las nuevas contrataciones... Y, en medio de todo esto, activa los sábados durante el ERTE, lo que consideramos inadmisible», sostuvieron.

Reiteraron que mantendrán su llamamiento a la huelga y a la movilización todos los sábados que la empresa establezca como jornada laboral.

El pasado fin de semana, la dirección suspendió la producción prevista inicialmente para el sábado debido a «problemas de suministro de piezas».