Los sindicatos ELA, LAB y ESK de la planta de Mercedes de Gasteiz, que suman 14 de los 31 representantes del comité de empresa, criticaron ayer el Memorando de Entendimiento que horas después firmaron el Gobierno de Lakua, la Diputación de Araba y Mercedes-Benz España porque se trata de una «campaña» para «presionar a la plantilla» con el fin de que asuma las condiciones de la dirección en la negociación del convenio colectivo.

Así lo afirmó, en declaraciones a los medios, el presidente del comité, Igor Guevara (ELA), quien calificó de «impresionante» que la parte social desconociera lo que se iba a firmar y tachó de «insólito» que la consejera de Desarrollo Económico, Arantxa Tapia, y el diputado general, Ramiro González, hablasen del tema sin ni siquiera haber conversado con los sindicatos.

Estos tres sindicatos han convocado para hoy a la plantilla a una asamblea general para abrir un debate sobre los pasos a dar en la negociación colectiva ante la «gran relevancia» de la decisión sobre la propuesta de la dirección de vincular inversiones millonarias en la planta a una mayor flexibilidad laboral. Hicieron este anuncio durante la concentración llevada a cabo ante los juzgados coincidiendo con el juicio por el ERTE planteado por la dirección para el primer semestre de este año.

La negociación del convenio colectivo

La dirección de la planta alavesa de Mercedes ha propuesto una inversión de 1.200 millones de euros, lo que supondría doblar la capacidad actual de la fábrica, en el marco del proceso de negociación del nuevo convenio. Ayer, el presidente del comité de empresa censuró que, tras 18 meses de negociación, la dirección plantee una inversión millonaria que viene acompañada de un «chantaje» para recortar las condiciones laborales de los trabajadores cuando estos han demostrado su valía con récord de producción.

Y advirtió de que la firma de un acuerdo como este no garantiza esa inversión porque la gerencia de la planta de Gasteiz les ha trasladado que esa decisión la adoptará finalmente la dirección de la multinacional en Alemania. Precisamente, el lehendakari de la CAV, Iñigo Urkullu, anunció el pasado viernes que tiene previsto viajar en julio a Alemania para trasladar al CEO de Mercedes-Benz el compromiso de las instituciones vascas con la planta de Gasteiz y el proyecto planteado por la dirección, a lo que se suma la firma del comentado Memorando de Entendimiento que tuvo lugar ayer en el Parque Tecnológico de Araba.

«Nos llama la atención que los políticos no han tardado en salir en defensa de la empresa cuando esta lo ha pedido. Poco han preguntado a la parte social sobre las condiciones» que pone la dirección, lamentó Guevara.

Las «líneas rojas» de ELA, LAB y ESK

Estos tres sindicatos han convocado una asamblea abierta a toda la plantilla para explicar sus «líneas rojas» en la negociación del convenio, que pasan por mantener el poder adquisitivo, no ampliar la flexibilidad, rechazar que se active una sexta noche en el turno de noche, un contrato relevo mejorado, que las nuevas incorporaciones no tengan peores condiciones laborales y regular las de quienes trabajan el fin de semana.

Por su parte, UGT y CCOO, que suman 11 de los 31 miembros del comité, han convocado para hoy paros y movilizaciones. «Básicamente, lo que nos diferencia respecto a CCOO y UGT, por un lado, y a Ekintza y PIM, por otro, es la flexibilidad; nosotros rechazamos la sexta noche y ellos le han puesto un precio», indicó Dani Ramos (ESK).