Todo influye. Si hasta hace unas semanas debía buscar un titular corto, ahora me puedo explayar, de tal manera que quiero explicarme demasiado y cuando empiezo a desarrollar la idea, me colapso. O no tengo más que decir. Atención a los recortes del pensamiento. Que un Tribunal Supremo esté por encima de un Congreso o un Parlamento debería inquietarnos. No es hoy, precisamente USA, el ejemplo de la democracia moderna. Su constitución tiene tantas goteras para que entre el pus reaccionario, pregolpista y antidemocrático que deberían empezar a preocuparse de manera más profunda. Una sentencia acaba con un derecho ejercido durante más de cinco décadas. Que lo expliquen. Se trata del derecho al aborto, cosa muy golosa para la internacional de extrema derecha.

Aparece de nuevo Jaime Mayor Oreja. No es broma. Está en ello. Aglutinando agrupaciones y sectas para proclamar que están en contra del aborto. ¿Reconocen este espacio político? Dicen que están a favor de la vida. ¿No será que quieren soldados del mañana? Perdonen. Una noticia terrorífica: vuelve el carbón. Quemar carbón para mover máquinas significa extraer más carbón de las minas, contaminar de manera extraordinaria.

La derogación de lo establecido. Todo aquello que parecía logrado, conseguido, aposentado se está cuestionando cuando no volviendo hacia atrás, en retroceso. De lo que se confiere que hay que insistir con mayor determinación en lo obvio, en defender los derechos adquiridos en todos los ámbitos, en no darle espacio a la extrema derecha civil, judicial, política, policial y militar.