Martxelo DÍAZ
IRUÑEA

La negociación sobre la Ley Mordaza se prolonga al 31 de enero

La negociación sobre la reforma de la Ley Mordaza continuará hasta el 31 de enero, según se acordó ayer. Se ha evidenciado la división que existe entre las fuerzas del Gobierno español y EH Bildu, que denuncia que la reforma no tiene en cuenta aspectos que deberían ser básicos.

Protesta contra la Ley Mordaza en Gasteiz en abril de 2019.
Protesta contra la Ley Mordaza en Gasteiz en abril de 2019. (Jaizki FONTANEDA | FOKU)

La negociación sobre la reforma de la Ley Mordaza se ha prorrogado una semana más, fijándose como fecha definitiva para acordar un texto y enviarlo al Pleno del Congreso el 31 de enero.

La prórroga de la negociación deja en evidencia la división existente entre las fuerzas que forman el Gobierno español (PSOE y Unidas Podemos) y EH Bildu y ERC por otra parte.

La formación abertzale se había fijado una serie de líneas rojas calificadas como de mínimos que debían incorporarse irremediablemente para que la reforma de la Ley Mordaza pudiera salir adelante en el último tramo de la legislatura.

Concretamente, para EH Bildu es imprescindible que la nueva norma recoja la prohibición del uso de pelotas de goma, que se eliminen las llamadas devoluciones en caliente y que se modifiquen las sanciones por «falta de respeto a la autoridad», que han supuesto numerosas multas. También pide que se traslade a las comunidades autónomas con competencias de Tráfico información previa sobre los controles policiales.

Promesa de derogación

En EH Bildu recuerdan que el Gobierno español prometió derogar la Ley Mordaza, pero ha impuesto un marco en el que inicialmente pasó a plantear la reforma y finalmente los cambios no contienen siquiera aspectos que se consideran básicos. La formación abertzale considera que la presión de los sindicatos policiales ultraderechistas contra cualquier cambio en la Ley Mordaza está detrás de la tibieza en la posición del Ejecutivo de Pedro Sánchez.

En las últimas semanas, varios medios habían destacado que se habían producido avances en la negociación. Sin embargo, desde EH Bildu destacan que «no han aceptado ni una de las demandas que hemos planteado» y recuerdan que con la Ley Mordaza está sucediendo algo similar a lo que ocurrió con la reforma laboral, un progresivo vaciamiento de contenido para no modificar lo que era necesario cambiar.

En la reunión de la ponencia de ayer, las fuerzas que forman el Gobierno español no tenían los votos suficientes para sacar adelante su propuesta, ya que EH Bildu y ERC no estaban dispuestas a asumir una reforma tan mínima. El escenario actual es que queda una semana para seguir negociando. En estos siete días las fuerzas soberanistas intentarán que PSOE y Unidas Podemos asuman los cambios que reclaman.

El Congreso habilitó enero para tratar de conseguir un acuerdo sobre la reforma de la Ley Mordaza. Finalmente, este proceso se prolongará hasta el último día del mes.

En la reunión de ayer se acordó que se eximirá a los organizadores de manifestaciones de la responsabilidad sobre posibles incidentes.