Markus Howarden hirukoa!», «Howard, bi puntu!». En el Buesa Arena la muñeca de su nueva figura está funcionando como una ametralladora. Es la revelación de la temporada. Viene de una familia adicta al baloncesto, empezando por su hermano Jordan. Físicamente casi su fotocopia, es profesional, un clásico journeyman que ha pasado por muchos equipos, de Francia a México y de Puerto Rico a Corea del Sur. Esta temporada defiende los colores del Nápoles, en la liga italiana, y está promediando cifras interesantes: 15,9 puntos, 1,9 rebotes y 2,6 asistencias por partido. Una de sus mejores actuaciones ha sido ni más ni menos que contra Armani Milán, donde ha anotado 22 puntos en una victoria vital.

¿Qué se siente siendo el hermano de uno de los jugadores más excitantes de Europa?

Muy feliz y orgulloso por lo que está haciendo Markus. Sabía que cuando llegara allí podría tener mucho éxito y que era capaz de tener un impacto tremendo también en el máximo nivel.

¿Cuántas veces habla con Markus?

Todos los días. Somos muy cercanos y confiamos mucho el uno en el otro. Nos admiramos, nos respetamos y nos mantenemos motivados mutuamente. Somos capaces de simplemente hablar y reír un rato y dejar de pensar en el baloncesto. Pero también podemos animarnos y darnos consejos cada vez que tenemos dificultades e incluso cuando lo estamos haciendo bien, para mantenernos regulares.

¿Qué le dijo a Markus cuando eligió Gasteiz?

Yo sabía que Baskonia era un gran lugar para que él comenzara su viaje en el baloncesto europeo. Tienen una organización increíble y siempre han contado con grandes escoltas que van allí y generan impacto. Al principio Markus no sabía qué esperar de esta experiencia en Europa. Yo solo le dije que fuera el mismo de siempre y que con eso iba a tener una gran temporada. Efectivamente es lo que está pasando hasta ahora. Sabía que lo conseguiría por el gran jugador y persona que es.

Gasteiz y Nápoles son dos ciudades muy distintas, pero han aterrizado muy bien en ambos lados. ¿Acaso es una característica de los Howard, saberse adaptar?

Sí. Creo que es debido a cómo nos criaron nuestras familias y cómo ambos asistimos a universidades lejos de casa [los Howard son de New Jersey; Markus estudió en Marquette, en Milwaukee, mientras que Jordan lo hizo en Northern Arkansas, es decir a miles de kilómetros]. Siempre hemos podido adaptarnos a cualquier entorno y situación y encontrar el éxito. Nuestros maravillosos padres nos criaron muy bien tanto física como mental y espiritualmente, para tener fe y confianza en todo lo que hacemos. Nuestro hermano mayor Desmond también fue un gran líder para nosotros y nos permitió convertirnos en lo que somos gracias a su ejemplo y liderazgo.

Usted y Markus nunca han jugado juntos. Me imagino que algún día le gustaría hacerlo...

Sí, ese siempre ha sido uno de nuestros mayores sueños; poder jugar juntos. Nos encantaría, a ver si ocurre con un poco de suerte, algún día antes del final de nuestras carreras.

¿Por qué cree que Markus está jugando tan bien en el Baskonia? ¿Esperaba algo así?

Porque es un talento y un compañero de equipo muy especial. Es un tirador y anotador de élite, capaz de algo espectacular que solo unos pocos jugadores en el mundo pueden hacer. Esperaba un desempeño así y no me sorprende porque lo he visto toda su carrera y veo lo duro que trabaja.

¿Y usted en Nápoles? ¿Cómo siente la liga, la ciudad...?

Me ha encantado Nápoles hasta ahora, Italia es un país maravilloso y esta entidad ha hecho un trabajo increíble para hacerme sentir cómodo, como en casa. La liga es de muy alto nivel y he estado disfrutando de la competencia. Y la ciudad es preciosísima, una de las mejores del mundo.

¿Quiere decirle algo en público a Markus?

No puedo decir nada que no le haya dicho a Markus ya, pero sí reiterar que estoy muy orgulloso no solo del increíble jugador de baloncesto que es, sino sobre todo de la maravillosa persona y hombre de fe que es. Es una de las mejores personas fuera de la cancha y el trabajo que hace dentro es igual de asombroso. Me emociona ver cómo se desarrolla esta nueva vida para él, sé que será grandioso. I love you bro!