Sustrai Erakuntza anunció ayer que ha presentado alegaciones a los planes de la cooperativa Valle de Odieta de ampliar la macrogranja de Caparroso y mostró su temor de que se haya producido una extensión irregular de la explotación.

Según explica este colectivo, actualmente Valle de Odieta tiene autorización -tras la intervención a su favor del TSJN- para albergar en Caparroso 7.620 UGM (el equivalente a una cabeza de ganado) y en diciembre presentó al Gobierno navarro una solicitud de ampliación para llegar a las 9.678 UGM, lo que supone un incremento del 27% respecto a la capacidad actual.

Sustrai recuerda que el recientemente aprobado decreto estatal fija en 850 UGM la máxima cantidad de ganado vacuno en una explotación, por lo que la de Caparroso supondría superar en un 1.138% el límite establecido.

Aunque este límite se fija solo para las nuevas explotaciones -de hecho, es la puntilla al proyecto de Noviercas, también de Valle de Odieta-, el decreto señala, además, que las existentes actualmente no podrán ampliar su tamaño.

«De este modo, creemos que el Gobierno de Navarra no puede acceder a las pretensiones de la empresa Valle de Odieta, y debe impedir que la empresa amplíe su explotación», reclama Sustrai.

«Ampliación sibilina»

Junto a ello, Sustrai revela que a pesar de que Valle de Odieta tiene autorización para 7.620 UGM, en la documentación presentada al Ejecutivo navarro recoge que dispone de 7.900 UGM, un 3,67% más de lo permitido. Por ello, reclama al Gobierno que compruebe si existe una irregularidad y que, de ser así, la corrija.

Sustrai recuerda que la cooperativa Valle de Odieta tiene un amplio historial de irregularidades, con once expedientes sancionadores por parte del Ejecutivo de Iruñea por cuestiones como constuir nuevas naves sin tener licencia para ello.

«Nos encontramos ante una empresa que llevó a los tribunales la denegación de autorización por parte del Gobierno de Navarra de aumentar su cabaña ganadera. Una empresa que utilizó todo su poder económico para conseguir en los tribunales la ampliación. Y que, además, actúa por hechos consumados, dado que ya antes de conseguir los permisos tenía instalaciones construidas y, de hecho, ya tenía más animales que los autorizados, como demuestran los expedientes sancionadores», subraya Sustrai, que pide al Ejecutivo de María Chivite que «actúe para impedir que la empresa lleve a cabo esta posible ilegalidad».

Paso adelante en la ley navarra

El Gobierno navarro manifestó ayer su conformidad con la toma en consideración de la proposición de ley de modificación de la ley foral de sanidad animal que, entre otras cuestiones, establece tamaños máximos para las explotaciones ganaderas.

La iniciativa -presentada por PSN, Geroa Bai y Podemos-Ahal Dugu- responde a la necesidad de adecuar la ley navarra a los límites estatales. Ahora, volverá al Parlamento navarro, donde deberá recabar el visto bueno de EH Bildu para poder ser aprobada. La formación abertzale vetó una norma previa al considerar que no fijaba unos límites adecuados a las explotaciones. La ley impulsada por el Ejecutivo navarro establecía un límite de 1.250 UGM, superior a lo decretado ahora desde Madrid.

El decreto del Gobierno español establece una capacidad máxima de 850 UGM para las granjas bovinas, aunque este límite no afecta a la macrogranja de Caparroso porque estaba implantada antes de la entrada en vigor de la norma.GARA