A. G.
FIBA BCL

Correctivo murciano a un mal Bilbao Basket

Hakanson estuvo muy vigilado y agobiado.
Hakanson estuvo muy vigilado y agobiado. (FIBA BASKETBALL)

Definitivamente, Surne Bilbao Basket está en un mal momento. Los hombres de negro se llevaron un correctivo muy doloroso y severo en el Palacio de los Deportes de Murcia, ante un UCAM que supo frenar en seco la creación de juego de Hakanson y encontró a unos entonadísimos McFadden y Pustovyi para imponerse a placer. Cuando lo mejor de un partido es haber perdido por menos de 20 puntos, malo.

Sito Alonso puso a Sadiel Rojas encima de Hakanson y el armador sueco de Bilbao Basket jamás se encontró cómodo. Y para colmo de males, un puntal como Xavi Rabaseda vio su segunda falta en menos de tres minutos. El alero de Ripoll no volvería hasta el tercer período y ya para entonces el duelo estaba más que finiquitado.

Mal que bien, Adam Smith mantuvo a los hombres de negro durante el primer cuarto, pero del 16-13 se pasó al 20-13 del final del primer período y en el segundo llegó el show de McFadden. De sus 17 puntos, 15 llegaron en este segundo cuarto, mientras que el gigante Pustovyi se encargó de dinamitar la pintura bilbaina. Ponsarnau sentó a Kyser por imposible y Jeff Withey acabó desquiciado con el ucranio. Ya para el descanso, con 48-29 en el marcador, el encuentro no tenía solución.

DESASTRE Y MAQUILLAJE

Bilbao Basket se conjuró en el vestuario para arreglar el desaguisado, quizá con ideas para afrontar la remontada... Todo quedó en nada. Los tres primeros ataques de los vizcainos se saldaron con pérdidas y entre Diop, Trice y Luther la renta murciana sobrepaso fácilmente la veintena.

Rabaseda y Francis Alonso le daban un poco de criterio al juego bilbaino, pero a la que saltaba Pustovyi a la cancha, las costuras de los de Ponsarnau reventaban. Solo quedaba maquillar el resultado de cara al average particular de estos dos equipos en el grupo L de la FIBA BCL. Todavía resta para que estos dos conjuntos se vean las caras en Miribilla, y quizá para entonces la cara de los hombres de negro sea otra. La de anoche, por desgracia, fue muy triste.