A. G.
BALONCESTO

Hasta los triunfos raros sirven para sumar

Heidegger cuajó minutos interesantes.
Heidegger cuajó minutos interesantes. (E. PORTILLO | FOKU)

Parece mentira, pero en un partido que Saski Baskonia dominó claramente a partir del segundo cuarto, el cuadro gasteiztarra solo ganaba ese cuarto: el 31-15 del segundo asalto que, a la poste, resultó decisivo para la suerte del partido.

Pero los triunfos raros también sirven para sumar, sobre todo ante un Panathinaikos mucho más tozudo de lo que cabía esperar. Los 24 puntos de Markus Howard, los buenos minutos de Max Heidegger y la aportación puntual de secundarios como Costello y Marinkovic sirvieron para tal propósito.

Porque cuando el marcador ponía un 6-16 nada más comenzar el duelo, las sensaciones eran horribles. Por algún motivo es Dwayne Bacon el máximo anotador de la Euroliga, y si el duelo comenzó mal, fue por el tremendo inicio del alero norteamericano, valiéndose de una defensa blanda de los de Peñarroya.

La única buena noticia fue que Bacon cometió con rapidez dos personales, y en adelante se fue dispersando en exceso. A tal punto que acabó por enfrentarse con el público, con gestos maleducados incluidos en el lote.

UN BUEN BASE

El primer cuarto, fruto de la rotación baskonista, acabó 21-23, pero la primera ventaja no llegaría hasta el 24-23, obra de Max Heidegger. El base americano-israelí demostró que sabe jugar. Rápido y espabilado, quizá su gran tara sea que tiene un fondo físico limitado. O es que en la Euroliga se corre más.

Con Markus Howard encontrando el acierto en base a las penetraciones y un Costello muy enchufado, el duelo pareció romperse al irse al descanso con 52-38, y con un parcial al retorno de los vestuarios de 8-2, tras técnica a Bacon: 60-40.

Pero en esas, con Derrick Williams, Papagiannis y Grigonis tratando de agarrarse al partido, Panathinaikos volvió. Fue, en todo caso, más un peligro latente que real. Nunca dio la impresión de que el choque se fuera para Atenas, pero el Baskonia se vio incómodo, debiendo derrotar más de una vez a su rival hasta por fin lograr otra victoria. El Baskonia se consolida en la sexta plaza de la Euroliga.