Nerea LAUZIRIKA
BILBO

Profesionales que trabajan con personas sin hogar reclaman más recursos para avanzar

Realizan trabajo de calle con personas que, por diferentes circunstancias, se han quedado sin hogar y, aunque sus áreas de actuación son distintas, todos coinciden en señalar que no cuentan con los recursos suficientes para dar respuesta a las necesidades existentes. Reunidos en Bilbo, intercambiaron experiencias y explicaron sus proyectos.

Ugalde, Boceta, Gómez y Moreno, en la jornada del pasado miércoles.
Ugalde, Boceta, Gómez y Moreno, en la jornada del pasado miércoles. (Oskar MATXIN | FOKU)

La asociación Bizitegi, que trabaja en favor de las personas en situación de exclusión, como las que no tienen hogar, reunió en Bilbo a profesionales que debatieron en torno a la realidad del sinhogarismo. Moderados por Xabier Madariaga, Daniel Ugalde Galera, Sara Boceta Santano, Jose Manuel Gómez y Maria Moreno Rodrigo abordaron “La relación con las personas en situación de sin hogar, iniciando la reflexión desde el trabajo de calle”.

Si bien centraron sus intervenciones en explicar sus respectivos proyectos, coincidieron en calificar como insuficientes los recursos existentes, debido al gran número de personas que se encuentran sin hogar.

Daniel Ugalde Galera presentó a los asistentes a la jornada celebrada el miércoles el proyecto habitacional LGTBI “Hogar con orgullo”, que funciona en la Comunidad de Madrid desde 2016. Desde su experiencia, planteó la cuestión del aumento de la cantidad de personas del colectivo que se encuentra sin hogar, poniendo en duda si se trata verdaderamente de un aumento de casos o si simplemente se les da más visibilidad ahora. Hasta el momento han atendido a unas 140 usuarias y usuarios.

Ugalde criticó que se les acusara de formar guetos por ofrecer un recurso especifico y exclusivo para personas LGTBI, asegurando que nadie se plantearía calificar de esa manera recursos destinados a la infancia o a la violencia machista, por ejemplo. Explicó que mientras los recursos generales no sean seguros para todos, son necesarios espacios como el proyecto ‘‘Hogar con orgullo’’. Debido a la gravedad de las experiencias de quienes recurren al servicio, Ugalde explicó que son procesos largos.

Sara Boceta Santano forma parte de la Fundación Luz Casanova y dio a conocer el proyecto “La luz de las luciérnagas”, que atiende a mujeres sin hogar de la Comunidad de Madrid que sufren o han sufrido violencia sexual. Señaló la falta de formación de los profesionales que trabajan con personas sin hogar en el ámbito de la perspectiva de genero, y aseguró que sin un enfoque interseccional es imposible abordar este problema.

Explicó que trabajan para concienciar y empoderar a las mujeres que llegan al proyecto para que identifiquen las violencias que sufren y puedan enfrentarse a ellas. Aseguró que prácticamente todas las mujeres en situación de calle han sufrido violencia machista en diferentes expresiones.

A PIE DE CALLE

José Manuel Gómez se presentó como «el psicólogo de la furgo». Se trata de la unidad KAM que funciona en Gipuzkoa y que proporciona asistencia psicológica a pie de calle con una consulta móvil que se traslada en una furgoneta.

Precisó que, si bien el servicio que prestan no saca a las personas de la calle, sí les coloca en una posición desde la que pueden avanzar de forma más fácil en sus procesos. Y es que, entre otras cuestiones, la terapia favorece que quienes recurren a ella hagan un uso adecuado de otros recursos que se les ofrecen.

María Moreno Rodrigo, del grupo de intervención comunitaria Ondoan, informó que se dedican a facilitar el acceso, entre otras cosas, a los recursos sociales a las personas sin hogar. Al ser preguntada por la cuestión, afirmo que la situación ideal para llevar a cabo su labor es aquella en la que los profesionales de diferentes entidades establecen redes, aunque admitió que en ocasiones esa colaboración no es fácil.

Del mismo modo, explicó que la sociedad en general necesita «más calle» para ver a las personas que están detrás de cada situación. También reclamó más recursos para poder trabajar con personas en situación de sin hogar.