El Consejo de Ministros del Gobierno español aprobó ayer extender el permiso de lactancia hasta un total de 28 días y la reforma del subsidio por desempleo, que será de mayor cuantía durante el primer año de percepción y compatible con un empleo durante los 180 primeros días sin pérdida de prestación.

La vicepresidenta segunda del Ejecutivo y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, señaló en la rueda de prensa posterior que, «a día de hoy, todos los trabajadores y trabajadoras» del Estado «van a tener permiso de lactancia por un periodo acumulado de 28 días».

Actualmente, el artículo 37.4 del Estatuto de los Trabajadores establece el derecho a una hora de ausencia del puesto de trabajo para el cuidado del lactante hasta que este cumpla nueve meses.

De igual forma, se fija también que quien ejerce ese derecho, por su voluntad, puede sustituirlo por una reducción de su jornada en media hora o acumularlo en jornadas completas.

No obstante, según explicó Díaz, el permiso «estaba condicionado a la incorporación de este derecho en la negociación colectiva», lo que producía «situaciones desiguales y discriminatorias», por lo que la reforma aprobada «es de gran importancia».

SUBSIDIO POR DESEMPLEO

Por otro lado, la vicepresidenta explicó que también se había dado luz verde al Real Decreto-Ley que reforma el subsidio por desempleo, que será de mayor cuantía durante el primer año de percepción, compatible con un empleo durante los 180 primeros días sin pérdida de prestación, e irá ligado a la suscripción de un acuerdo de actividad por parte de sus beneficiarios.

Esta reforma ha sido objeto en las últimas semanas de enfrentamientos entre el Ministerio de Trabajo de Yolanda Díaz y el de Economía de Nadia Calviño, pero se ha desbloqueado tras llegar ambos Departamentos a un acuerdo, con cesiones por ambas partes para lograrlo.

En concreto, la reforma eleva el subsidio por desempleo, actualmente de 480 euros mensuales, el equivalente al 80% del Iprem (Indicador Público de Renta de Efectos Múltiples), a 570 euros durante los primeros seis meses de percepción (95% del Iprem) y a 540 euros mensuales en los seis meses siguientes (90% del Iprem) para después recuperar el 80% del Iprem hasta su extinción, que se mantiene en un tope de 30 meses, dependiendo en cualquier caso de la edad, circunstancias familiares y de la duración de la prestación agotada.

Estas cuantías son las que corresponderían al subsidio con el actual Iprem, que es de 600 euros al mes.

En caso de que este indicador se incremente, también lo haría el importe del subsidio, pues lo que fijaría la reforma son los porcentajes del Iprem a los que debe equivaler la ayuda.

Eso sí, estas nuevas cuantías serán de aplicación a los nuevos perceptores que se reconozcan a partir de la entrada en vigor de la reforma, no a los anteriores.

PREVALENCIA DE CONVENIOS

El portavoz del PNV en el Congreso, Aitor Esteban, asimismo, compareció para dar cuenta de que también se había aprobado la prevalencia de los convenios autonómicos sobre los sectoriales o los estatales, una medida que se excluyó de la reforma laboral de Díaz y que está incluida en el acuerdo que los jeltzales alcanzaron con el PSOE para la investidura de Pedro Sánchez.

Aunque no había confirmación oficial por parte del Ministerio de Trabajo, Esteban celebró en rueda de prensa la aprobación de esta medida «largamente reclamada» por la clase trabajadora y de los sindicatos vascos. «Amplía lo que nosotros solemos llamar el marco de relaciones propio», subrayó.

En ese sentido, el sindicato ELA señaló que la decisión de «dar prioridad a los convenios negociados aquí es una gran victoria de la clase trabajadora vasca».