El Ibex no pudo consolidar ayer su posición sobre los 10.000 puntos presionado por el castigo al Santander en el ámbito doméstico y el descarte definitivo de una bajada de los tipos de interés por parte de la Fed en marzo, de acuerdo a las últimas palabras de su presidente, Jerome Powell.

El Ibex comenzará hoy con 9.941,30 puntos, después de retroceder un 1,20%. Su mayor lastre era Santander, que se hundía un 5%, arrastrado por por las informaciones sobre un incumplimiento de la normativa de Estados Unidos sobre sanciones a Irán.

En el lado de las caídas, también destacó Repsol (-1,59%), que daba un nuevo paso atrás con el desplome del precio del petróleo. Ayer, el barril de Brent se movía en los 77 dólares, por debajo de los 80 dólares de la semana pasada. ArcelorMittal, Cellnex, Acciona e Inditex bajaron más de un 2%. Los más alcistas del día fueron Acerinox (+3,80%), Rovi (+3,57%) y Ferrovial (+2,54%).

Las bolsas europeas, a excepción de Milán (+0,77%), se inclinaron por las caídas suaves. París cedía un 0,03%, Fráncfort retrocedía un 0,08%, y Londres caía un 0,04%. En Wall Street mandaban las ventas a la hora del cierre en Europa, tras las ganancias de la semana pasada y los máximos históricos del S&P 500.

En la jornada se contó con una nueva visión de la debilidad de la economía europea con la publicación de los PMI de enero. El índice compuesto se quedó en los 47,9 puntos, todavía por debajo de los 50 puntos, que indica expansión. Por el contrario, en Estados Unidos subía hasta los 52 puntos.