Desvaríos seniles
A mi modo de ver, erróneo seguramente, el envejecimiento produce en el individuo dos reacciones nada similares. Por un lado, -hablo desde la subjetividad-, tiendo a ampliar el grado de tolerancia hacia situaciones que me parecen erróneas porque, en su día, formé parte activa de las mismas; ese ponerse en el lugar del otro cuando además reconoces el lugar, hace crecer en uno la precaución en la emisión de juicios categóricos procurando un análisis concreto de la situación concreta. Por otro lado, esta edad provecta en la que me hallo (perdón por referirme al «yo», lo hago porque al parecer la sensación es compartida), decía que por otro lado me crispa sobremanera la sola pronunciación de ciertos vocablos utilizados como conceptos. Es oír a alguien desearme un feliz «finde» y se desata en mi interior, lejos de lo racional, un rechazo visceral que me obliga a responder con un «gracias, pero recuerda que pasado mañana es domingo a la tarde». «Finde» ¡tanto cuesta fin de semana! El mismo sujeto que el lunes entra por la puerta espetando un «Hola chicos, ¿qué tal el finde?» y los «chicos», unos ya con retención prostática y otras, con pérdidas de orina.
¿Y «colaca»? «Yo en vez de café desayuno colaca». ¿A un tipo cercano a los cuarenta le puede costar taaaanto esfuerzo decir cola-cao? Es sólo una «o» más. Cuando a los impúberes en su aprendizaje del lenguaje humano, ese instrumento que nos diferencia, para bien o para mal, de nuestros primos los bonobos, les hablamos como si fueran oligofrénicos, el resultado es que para describir algo que acontece de manera rápida hay quien dice «en cero coma». Hay una miríada de ejemplos.
Tanto si es el lenguaje el que estructura el pensamiento como si es el inconsciente el estructurado como lenguaje, estamos más que jodidos. A más pobreza de lenguaje, más pobreza de pensamiento; a menos pensamiento, menor inteligencia. A menos razón, más superstición. Así indocumentados al servicio de los canallas dirigen nuestras vidas. Desde las pantallas, sin esfuerzo. Todo muy «random».

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