La Asociación de Concejos del municipio de Gasteiz (Acovi-GKE) denunció ayer la «grave afección» que tendrán las plantas fotovoltaicas prevista por Solaria en tres enclaves, «llegando a una ocupación del 40% de su término concejil». Además, alertó de que las instalaciones, tanto las plantas fotovoltaicas como las líneas de evacuación de energía, estarán en algunos casos a menos de 500 metros de las casas, «incumpliendo el Plan Territorial Sectorial (PTS)».

En un comunicado, Acovi-GKE informó de las alegaciones presentadas por la asociación y por las entidades locales a las plantas Vitoria Solar 1, Vitoria Solar 2, Zierbena Solar 2, Zierbena Solar 3 y Zierbena Solar 4, así como a la línea de alta tensión que cruzará Araba de sur a norte.

«Seguimos con una gran preocupación por el gran impacto que estos macroproyectos pueden generar, e instamos al Ayuntamiento de Vitoria-Gasteiz, a la Diputación Foral de Álava y al Gobierno Vasco a estar a la altura de lo que Alava se merece y defienda a la zona rural de estos macro proyectos», indicó.

Y solicitó la «paralización de la tramitación de autorizaciones previas hasta no disponer de la aprobación definitiva del PTS de Energías Renovables, previamente debatido y con la participación de los agentes implicados».

«FUERTES PRESIONES»

Lurra denunció el martes que el proyecto Zierbena Solar es «ilegal, inaudito e inasumible social y ambientalmente», y alertó de una «fragmentación de proyectos en fraude de ley». Según explicó, Lakua carece de competencias para otorgar una autorización administrativa porque el proyecto sobrepasa los 50 megavatios (MW) de potencia instalada llegando hasta 150 megavatios, por lo que la tramitación correspondería al Gobierno español.

«Además, debería haber devuelto el expediente al promotor, por infringir la Ley de Evaluación Ambiental, ya que el documento sometido a información pública contiene irregularidades y deficiencias en lo relativo al estudio de alternativas, los efectos sinérgicos o los efectos sobre la salud de los campos electro- magnéticos, además de ocultación de datos», expuso Alberto Frías. Sobre la afección a la actividad agraria, destacó que «se infringe la práctica totalidad del Plan Territorial Sectorial Agroforestal, con la ubicación de las plantas en suelos calificados como Alto Valor Estratégico, donde se prohíben este tipo de instalaciones por su impacto sobre la tierra agraria fértil».

Aitor Ortiz de Zarate, agricultor de Martioda afectado por la planta solar Zierbena 4, advirtió de que «hemos recibido ofertas de compra y alquiler de las fincas, y fuertes presiones de Solaria para hacerse con nuestros terrenos».