Marcel PENA
BARAKALDO

Denuncia contra la «masacre» con sello vasco en Palestina

Concentración de Kakitzat ante las instalaciones de ITP Aero.
Concentración de Kakitzat ante las instalaciones de ITP Aero. (Oskar MATXIN EDESA | FOKU)

La coordinadora antimilitarista Kakitzat denunció ayer, en el primer aniversario del recrudecimiento del conflicto entre Israel y Palestina, la implicación de las empresas vascas en las «masacres» de los pueblos palestino y libanés, así como la implicación de los Gobiernos de Lakua y de Madrid a través de subvenciones y deducciones fiscales.

Una decena de miembros del colectivo se concentraron en Barakaldo ante la factoría de ITP Aero, empresa que consideran implicada en «el genocidio del pueblo palestino y, en la actualidad, también del pueblo libanés». Algunos de los miembros de Kakitzat acudieron ataviados con uniformes militares cuyos bolsillos rebosaban billetes, mientras sostenían una pancarta en la que se podía leer “ITP Aero. Tecnología para matar” y coreaban consignas como “Palestina, askatu” o “Israel hiltzaile, Europa laguntzaile”.

El miembro de Kakitzat Oskar Aranda explicó a GARA que el 39% de la facturación de ITP Aero proviene del negocio de la industria militar, principalmente por su dedicación en el mantenimiento y fabricación de componentes de los aviones militares Airbus 400M y el Avión de Combate Europeo. En el caso de la empresa vizcaina Sener, indicó que el volumen de negocio que proviene del «apartado militar» asciende hasta el 60%. En este sentido, Aranda no sólo criticó el papel de estas compañías, sino que también destacó la responsabilidad del Ejecutivo de Lakua que, a través de su línea de ayudas o deducciones fiscales, aporta anualmente 100 millones de euros a la «industria de la guerra». Una «cifra importantísima», según la organización antimilitarista.

En total, indicó que un centenar de empresas vascas, agrupadas muchas de ellas en el clúster de aeronáutica Hegan, se dedican a la producción militar, un negocio que factura anualmente 750 millones de euros en la CAV, la tercera comunidad autónoma del Estado en este apartado, solo por detrás de Madrid y Andalucía.

Del mismo modo, el militante de Kakitzat subrayó la implicación del Gobierno español en el conflicto, de quien dijo que «parte de una cuestión cosmética» y que «debería ser más contundente a la hora de denunciar el genocidio del pueblo palestino».

De hecho, afirmó que «directamente, empresas de titularidad público-privada están mandando armas a Israel». «Desde aquí pedimos un mayor compromiso y que se deje de subvencionar a este tipo de empresas», reivindicó Aranda.

La plataforma Ezkerraldea Palestinarekin llevó a cabo ayer por la tarde movilizaciones en Santurtzi, Portugalete, Sestao y Barakaldo, coincidiendo con el primer aniversario del 7 de octubre.