El Ejército israelí anunció ayer que mató al máximo líder de Hamas, Yahya Sinwar, el hombre más buscado en la ofensiva israelí en la Franja de la Gaza, y al que atribuye ser el cerebro de los espectaculares ataques del 7 de octubre. Según fuentes militares, la muerte de Sinwar se produjo el miércoles en combates en Rafah, al sur de la Franja.

Para Israel supone completar, más de un año después, uno de los objetivos que se marcó con la agresión contra Gaza y entre los que el rescate de los prisioneros israelíes pasó hace tiempo a segundo plano ante la prioridad en su estrategia de la destrucción de la Franja y aniquilación masiva de la población.

El ministro de Defensa, Yoav Gallant, publicó en X un mensaje mesiánico como los que han guiado el genocidio en Gaza. «Perseguirás a tus enemigos y delante de ti caerán a espada», citando el versículo 26 del Levítico.

Líder político y militar en Gaza, la muerte de Ismail Haniyeh en un ataque en Teherán situó a Sinwar al frente de todo el Movimiento de Resistencia Islámica palestino.

«Hamas ya no gobernará Gaza. Es el comienzo del día después de Hamas», afirmó triunfal el primer ministro, Benjamín Netanyahu. Lejos de darse por satisfecho, confirmó que el objetivo israelí va más allá y advirtió de que la guerra en la Franja, que acumula más de 52.000 muertos palestinos, todavía no ha terminado «con muchos desafíos por delante». Y extendió un mensaje a toda la región que sonó aún amenazante: «A Gaza, Beirut, a toda la región, les digo: la oscuridad retrocede y la luz surge». El Pentágono aseguró que EEUU no estuvo «directamente implicado» en la operación del Ejército israelí que mató al líder de Hamas, pero la vicepresidenta, Kamala Harris, aseguró que la Inteligencia estadounidense trabajó estrechamente con los israelíes para localizar a Sinwar.

«Este es un buen día para Israel, para EEUU y para el mundo», celebró el presidente de EEUU, Joe Biden. Otros aliados de Israel, como Alemania, también se felicitaron por la muerte del líder palestino.

EEUU dijo ver una oportunidad para la vuelta de los prisioneros israelíes, pero, aunque los medios occidentales lo situaban en la línea dura de Hamas, Sinwar tuvo un papel relevante en la negociación para lograr un alto el fuego y un canje de prisioneros.

MASACRE EN YABALIA

El interés de Israel sigue siendo la destrucción de la posibilidad de un futuro en Gaza y ayer siguió con las matanzas. Los bombardeos mataron al menos a 28 personas. incluidos niños, e hirieron a decenas más, en una escuela de Yabalia. El número de heridos y cadáveres desbordó al personal médico del Hospital Kamal Adwan.

Por decimotercer día, tanques y tropas israelíes continuaron asediando el norte de Gaza, en concreto Yabalia, Beit Hanoun y Beit Lahia, donde ya han muerto más de 400 personas en menos de dos semanas. 400.000 gazatíes permanecen completamente aislados y unos 200.000 llevan 13 días sin conseguir comida, bebida o medicinas.

Un informe elaborado por 16 agencias de la ONU y ONG ratificó que la persistencia de la ofensiva militar israelí y los obstáculos que pone al reparto de ayuda humanitaria hacen que la Franja no supere el riesgo de hambruna. El 91% de la población tiene problemas para subsistir y 345.000 personas han llegado al nivel de «catástrofe».

Ataques a Siria y a Yemen

Al menos dos civiles resultaron heridos en un ataque que Israel lanzó de madrugada contra varios objetivos en las proximidades de la ciudad siria de Latakia, en el oeste del país. Siria ha sido objetivo de múltiples ataques de Israel incluso antes de la operación contra Gaza, pero han aumentado con su campaña militar en Líbano. El opositor Observatorio Sirio de Derechos Humanos afirmó que el de ayer fue dirigido contra un depósito de armas. Esta organización indicó la semana pasada que Israel había lanzado al menos 19 ataques en Siria en una horquilla de tan solo diez días, en los que murieron 27 personas.

Por otra parte, los huthíes de Yemen aseguraron que habrá respuesta a los ataques que EEUU perpetró con bombarderos estratégicos B-2 contra posiciones y arsenales del grupo en varias zonas de Yemen, en un intento por demostrar las «capacidades estratégicas» estadounidenses.

Los huthíes, que controlan la capital yemení, Sanaa, y otras zonas del norte y el oeste del país desde 2015, han lanzado varios ataques contra territorio de Israel y contra buques con algún tipo de conexión israelí a raíz de la ofensiva desatada contra Gaza.

Por otro lado, las milicias proiraníes de Irak, englobadas en el mismo eje de la resistencia que los huthíes, lanzaron un ataque con drones contra la ciudad israelí de Eilat, junto al mar Rojo, en apoyo al pueblo palestino y al libanés.GARA