Iratxe FRESNEDA
Docente e investigadora audiovisual

Renoir

La japonesa Chie Hayakawa (“Plan 75”) presentaba en la sección oficial del Festival de Cannes su película con tintes autobiográficos, “Renoir”. La cinta, ambientada en los años ochenta, se adentra en la vida de una niña japonesa que trata de sobrevivir a su entorno familiar. El padre de Fuki (interpretada por Yui Suzuki) padece un cáncer terminal y su madre está superada por las circunstancias. Como resultado del drama familiar, la niña deambula en busca de contacto y comunicación humana. Cualquier situación que pueda parecernos inverosímil en la ficción o parte de los delirios de una cineasta, es más bien un retrato de la realidad pasada por el filtro del cine. Probablemente, si las mujeres contáramos todo el tipo de abusos e intimidaciones que hemos padecido desde la infancia y alguien hiciera una película con ellas, habría algún crítico que la tacharía de ingenua o exagerada (que es, precisamente, lo que han hecho con una de las secuencias de la película). Hayakawa consigue crear en “Renoir” secuencias mágicas, emocionantes, sin artificios, con una sutileza que hace fluir la narración hasta el final. A pesar de no tratarse de un tema novedoso, la película es única, delicada, preciosa.