El partido entre el serbio Novak Djokovic, número dos del mundo, y el checo Radek Stepanek abrirá hoy la final de la Copa Davis en el Kombank Arena de Belgrado. Según el sorteo efectuado ayer, Dusan Lajovic, por Serbia, y Tomas Berdych, por los checos, disputarán a continuación el segundo punto.

Mañana, el partido de dobles cruzará a los locales Ilija Bozoljac y Nenad Zimonjic contra los checos Jan Hajek y Lukas Rosol. Los encuentros entre Djokovic y Berdych, y Lajovic y Stepanek, cerrarán el domingo el programa de la final.

El equipo serbio, que lidera Djokovic, coronado el lunes «maestro de maestros», tiene la oportunidad de destronar al actual campeón, la República Checa. Serbia llega de nuevo a la final después de su victoria en 2010, año en el que se coronó campeona por primera vez frente a Francia precisamente en Belgrado. El destino ha deparado que su segunda final tenga lugar de nuevo en aquel mismo escenario donde entonces Djokovic ganó sus dos partidos individuales. Será la tercera ocasión en la que Serbia y República Checa se miden en Copa Davis como naciones independientes (antes lo hicieron como parte de Yugoslavia y Checoslovaquia, respectivamente).

Djokovic y sus compañeros se volcaron ayer dando ánimos a Lajovic, designado para reemplazar al lesionado Janko Tipsarevic. «Es un chico excelente y quiero decirle que él no tiene la obligación de ganar, pero sí la obligación de entregar el 100% de sí mismo, y si hace eso, todo el público sabrá reconocerlo y valorarlo, más allá de cualquier resultado o cualquier circunstancia. Es una experiencia maravillosa, para la cual Dusan (Lajovic) está preparado y cuenta con todo nuestro incondicional apoyo», señaló el número dos del mundo.