Natxo MATXIN
Inferioridad numérica

Cuatro expulsiones en las seis últimas jornadas

Que Osasuna acabe con once sobre el campo se ha convertido en las últimas jornadas en todo un imposible. Unas veces por exceso de celo de los trencillas y otras porque los rojillos rozan el límite, la cuestión es que ya casi no hay partido en el que acabe el equipo al completo. El dato es demoledor: ha visto cuatro rojas en los últimos seis encuentros ligueros que ha disputado.

De sobra es conocido que no hay mucho feeling entre el estamento arbitral y la escuadra navarra, al igual que con cualquier otro club de los denominados modestos, pero las cifras resaltan que el ensañamiento con la entidad rojilla suele ser práctica habitual. Rara es la campaña en la que Osasuna no aparezca en la parte alta del ránking de equipos con más tarjetas rojas, como se puede comprobar en las más recientes disputadas.

Y este año, de momento, va por el mismo camino. No en vano, junto al Rayo, ya encabeza el número de expulsiones contabilizadas en lo que se lleva de la presente temporada. Un total de cinco, y cuatro de ellas, como ya se ha mencionado, concentradas en las seis últimas jornadas.

Lo más grave es que cada uno de esos sucesos suele acarrear, por lógica, consecuencias funestas para las posibilidades de sumar puntos de Osasuna. En ese sentido, de las cinco ocasiones en las que algún rojillo fue enviado a vestuarios antes de tiempo, en cuatro de ellas el equipo acabó perdiendo y solo ganó en una, frente al citado Rayo, porque para entonces, El Sadar ya registraba un tranquilizador 3-0. Como dijo Javi Gracia a la conclusión del partido de Mestalla, jugar con uno menos resulta una limitación prácticamente mortal.

En números de récord

Haciendo una extrapolación de los números hasta ahora acumulados, si Osasuna sigue en la misma progresión de tarjetas rojas podría incluso superar las cifras más elevadas de su trayectoria en Primera durante el presente siglo. Así, las estimaciones hablan de que se elevarían por encima de las 12 expulsiones que el equipo vivió en la temporada que José Antonio Camacho aterrizó en el banquillo rojillo.

En estos últimos 14 ejercicios no ha habido guarismos tan grandes como los citados, pero sí campañas con dos cifras, como fue el caso de la 2007-08 y la del año pasado, en las que las rojas llegaron a alcanzar la decena, seguidas de la 2003-04 y la 2009-10, que sumaron cada una de ellas nueve expulsiones.

Paradójicamente, la reentrada en la máxima categoría con un equipo novato y sin experiencia a la hora de competir contra los más grandes fue la época en la que el equipo fue menos castigado por los árbitros. Las dos primeras campañas de Miguel Ángel Lotina -2000-01 y 2001-02- apenas se vieron cartulinas rojas, tres en la primera de ellas y cuatro en la segunda.

Puñal, lejos de las cifras de los futbolistas más expulsados

Junto a Josetxo, Rípodas y Sergio -el asturiano recibió diez rojas en toda su trayectoria-, Puñal se convirtió en el rojillo que más veces ha sido expulsado, un total de seis.

Unos números que, sin embargo, están muy lejos de las cifras de los futbolistas que más rojas han visto en su carrera deportiva.

El ránking lo encabezan la dupla formada por Xavi Aguado y Pablo Alfaro -coincidieron en el Zaragoza durante dos campañas, 1990-91 y 1991-92-, con 18 expulsiones. Una menos protagonizó el central tinerfeño Juanito y le sigue el primer vasco del ránking, Patxi Salinas, con 15. N.M.