BALONMANO

El empate mantiene al Bidasoa en la pelea

PUENTE GENIL 21

BIDASOA 21

Del mal, el menos. Bidasoa necesitaba ganar ayer para apretar el grupo de tres clubes que se habrían quedado cerrando la clasificación con 6 puntos, y con la ventaja de que los irundarras habrían obtenido dos en la pista de uno de ellos, el Puente Genil.

Pero no hubo forma, en un partido malo, «amenizado» de forma antirreglamentaria desde la megafonía del pabellón, con un «speaker» que no dejó de gritar en ningún momento, los dos equipos que cierran la tabla se enzarzaron en un festival de desaciertos en el que los porteros adquirieron protagonismo.

Chirosa posibilitó que los locales dominaran el marcador en el primer cuarto de hora (5-3), pero las paradas de Zubiria y una racha de aciertos de Alvarez propiciaron un giro en el marcador, que permitió llegar a Bidasoa con ventaja al descanso.

La segunda parte, bajo la fuerte presión del público, el partido se enredó mucho, se dieron todos los empates posibles desde el 9-9 al 21-21 final, y Bidasoa aguantó, que no era poco. Con los tantos de Crowley primero, luego de Azkue y Ugarte, el entrenador Fernando Bolea quiso destacar especialmente la aportación de Diaz de Cerio y Mujika, que lograron goles en momentos muy importantes. Desde el empate a 17, a diez minutos del final, Bidasoa siempre llevó la iniciativa en el marcador, pero no pudo despegarse nunca de dos goles que le habrían proporcionado cierto margen.

En esos instantes se echaron en falta un par de contraataques desaprovechados, el penalti errado por Crowley... Pero a 20 segundos del final un penalti al propio Crowley ponía el triunfo al alcance. Azkue asumió la responsabilidad, pero estrelló el balón en el larguero. La victoria se esfumaba, pero aún había que defender el empate, y los bidasotarras lo hicieron con uñas y dientes hasta el pitido final. Puente Genil pidió tiempo a falta de 21 segundos, pero solo pudo lograr un golpe franco con el tiempo a cero, que Zubiria paró.