El Pleno del Tribunal Constitucional (TC) rechazó ayer el recurso de amparo presentado por el expresidente del Parlamento de Gasteiz Juan María Atutxa y los exmiembros de la Mesa Kontxi Bilbao y Gorka Knorr contra la multa y la pena de inhabilitación que les fue impuesta en abril de 2008, cuando el Tribunal Supremo (TS) les condenó por desobediencia a la autoridad judicial por no disolver el grupo parlamentario Sozialista Abertzaleak.

Según informó Europa Press, la condena del TS fue consecuencia de la estimación del recurso interpuesto por Manos Limpias contra la absolución de los parlamentarios, acordada en diciembre por el Tribunal Superior de Justicia del País Vasco.

La Fiscalía no acusó a los parlamentarios, dejando la exclusividad de la acción a la acusación popular ejercida por Manos Limpias. La decisión del TS en este caso fue contraria a lo establecido en la denominada «doctrina Botín», que impidió la apertura de un proceso al banquero a instancia de la acusación popular, aunque el TC dice ahora que no se vulneró el principio de igualdad.

Reacciones al fallo

Las reacciones no se hicieron esperar. En opinión del portavoz de Lakua, Josu Erkoreka, la sentencia es «francamente desafortunada» y supone un «pésimo augurio en relación con lo que puede esperarse» de este órgano. Asimismo, Oskar Matute consideró que el TC ha actuado como «un ariete político del Gobierno». Bakartxo Tejería, presidenta del Parlamento, señaló que Atutxa actuó en defensa de la Cámara.