MANRESA - BILBAO BASKET

No fue un simple cara o cruz que salió mal, sino que Bilbao Basket perdió frente a UCAM Murcia por culpa de muchas pequeñas circunstancias. Todas ellas devinieron en el triple final de Scott Wood y en el 78-77 definitivo, algo que frenaba en seco la escalada de posiciones de los hombres de negro en pos de encontrar su mejor juego y un sitio entre los ocho mejores.

Pero ahora ya no hay tiempo para lamentarse, puesto que este mediodía los discípulos de Rafa Pueyo visitan el Pavelló Nou Congost para vérselas con el Manresa, un conjunto que en este primer tercio de campaña ocupa la parte baja de la tabla clasificatoria pero que, si uno se fija bien, se encuentra a una única victoria respecto a los hombres de negro. Es pues esencial aprender de los errores para que Bilbao Basket siga con su línea ascendente y deje atrás a un rival que, en un principio, no parece tener el nivel de los vizcainos. ¿Bastará con un día de viaje y preparación para pasar de la derrota a la victoria?

Una ventaja perdida

Bilbao Basket no solo no logró evitar un triple que separaba la victoria de la derrota, sino que dejó escaparse una ventaja de 11 puntos amasada durante tres cuartos jugados con solvencia.

En los diez últimos minutos, Augusto César Lima asumió el mando del juego interior -Kavaliauskas dio otra muestra de sangre caliente, pero sin ningún resultado en el juego-, mientras que varios errores en tiros fáciles de los hombres de negro -como la bandeja a la contra errada por Vrkic, una jugada que terminaría con falta antideportiva del alero serbio, que además ejerció de detonante de la reacción pimentonera- hicieron creer en el triunfo a los de Óscar Quintana.

Con esos antecedentes sobre el tapete, el preparador manresano Borja Comenge espera poder «sacar provecho» de la situación de los hombres de negro. «Ellos se quedan a entrenarse en Murcia sin pasar por Bilbo en unas fechas especiales, y eso podría jugar a nuestro favor», declaraba en la previa al duelo de este mediodía.

Comenge destacaba que, «en este tipo de jornadas y más jugando el domingo por la mañana, suelen haber sorpresas» y se mostraba esperanzado de que la victoria del equipo del Bagés pudiera ser «una de ellas».

El conjunto bilbaino deberá tratar ahora de recomponer la figura en una cancha que históricamente no le ha sido favorable -ha perdido en seis de sus ocho visitas a Manresa- ante un rival también necesitado de alegrías que sólo ha ganado uno de los seis últimos compromisos que ha disputado.

Una derrota en cancha manresana, además, reduciría notablemente las opciones del equipo de Rafa Pueyo de meterse entre los ocho primeros al término de la primera vuelta. A falta de cinco jornadas para llegar al ecuador de la Liga Regular, Bilbao Basket está empatado a cinco victorias con el Joventut, Laboral Kutxa Baskonia y UCAM Murcia y se encuentra a una de CAI Zaragoza, noveno, y Cajasol, octavo clasificado.

Otros recursos válidos

Bilbao Basket, también pese a la derrota en Murcia, pudo extraer conclusiones positivas. Entre otras cosas, Germán Gabriel volvió a recuperar el acierto exterior a su juego en el poste bajo -por no hablar de sus asistencias a Hervelle-, y Roger Grimau al fin dio minutos de calidad, incluso después de que Raül López cayera eliminado por faltas.

Pero si hubo alguien que destacaba en Murcia ese fue Fran Pilepic. Sin despegarse de su frialdad habitual, el escolta croata descongestionaba el ataque vizcaino a base de tiro exterior. Pilepic podría volverse un complemento más que válido si sigue soltándose de cara a canasta, empezando por Manresa.