En la temporada 1974/75, los Golden State Warriors conseguían el anillo de campeones de la NBA. Desde aquella campaña, la franquicia de Oakland había sido incapaz de encadenar diez triunfos consecutivos, hasta la pasada jornada liguera.

Por 80-101 ante los Milwaukee Bucks, los californianos mantenían su racha victoriosa gracias a los 22 punos y 18 rebotes del ala-pívot David Lee. El base Stephen Curry y el escolta Klay Thompson aportaron 15 puntos cada uno, y permitieron a los Warriors ponerse con una marca de 13-9 en partidos disputados fuera de su campo en lo que va de campaña. En total, los Warriors suman un balance de 24-13, compartiendo con los Clippers el liderato de la División Pacífico, y la cuarta plaza de la Conferencia Oeste, por detrás de Oklahoma, San Antonio y Portland.

Precisamente el líder del Oeste, Oklahoma City Thunder, caía por sorpresa frente a los Utah Jazz. Pese a los 48 puntos de Kevin Durant, los de Salt Lake City se valieron de las ausencias de Westbrook e Ibaka para, con el partidazo de Gordon Hayward -37 puntos, 11 rebotes y 7 asistencias-, imponerse por un claro 112-101. Portland, por 123-119, también caía por sorpresa ante Sacramento, gracias a los 35 puntos y 13 rebotes de DeMarcus Cousins. San Antonio fue la excepción, que batió a Memphis por 108-110 con un notable Tim Duncan.

Chicago corta a Bynum

Como estaba cantado, los Chicago Bulls decidían cortar al pívot Andrew Bynum. La franquicia de Illinois también confirmó a través de su vicepresidente de operaciones, John Paxson, que el entrenador Tom Thibodeau no «aprobó» el traspaso de Luol Deng a Cleveland.

«Es entendible que ni Tom (Thibodeau) ni su equipo se sientan felices por el traspaso del jugador en el que más confianza tenían. Pero debemos mirar al futuro», explicó Paxson.