BARCELONA 2

REAL 2

Lo imposible estuvo a punto de suceder. Sucedió, en cierta manera, porque la Real consiguió al menos humanizar a un Barcelona que no había sufrido tanto a lo largo de la temporada para salvar un punto. Solo un minuto evitó que el equipo donostiarra -el único que ha sido capaz de hacerle dos goles el líder y que se ha llevado algún punto del Joan Gamper- firmaran la proeza. El último del partido, en el que Miriam restablecía el empate y reducía la recompensa txuriurdin a un punto que, pese a todo, debe saber a gloria.

Sin dejarse llevar por la ansiedad con la que amenazaban la falta de resultados y las armas del rival, la Real se plantó a la perfección durante el primer tiempo. No tanto como para inquietar a Ràfols, pero sí al menos para reducir al mínimo las obligaciones de Cristina Cornejo. Así que todas las ocasiones del primer tiempo fueron blaugranas, pero se pudieron contar con los dedos de la mano y, lo más importante, ninguna subió al marcador.

Se torció la cosa nada más arrancar la reanudación, al aprovechar Sonia un rechace para adelantar al líder. Pero precisamente cuando más complicadas se pusieron las cosas, mejor fue la versión que ofreció la Real. Obtuvo recompensa con el empate a cargo de Aintzane Encinas, tras el que las culés se lanzaron con fuerza en busca de la portería blanquiazul. Pero el equipo donostiarra respondió manteniendo la serenidad en defensa y buscando una contra letal. Así llegó el delirio, a un cuarto de hora del final, con un balón largo que Nahikari García llevó al área para definir a la perfección.

Tocaba apretar los dientes y así lo hizo la Real. Pero el empuje y la calidad locales acabaron minimizando la campanada de la jornada, y permitieron al líder salvar un punto en el último minuto con un disparo desde la frontal de Miriam Diéguez.