Acabar un partido con la puerta a cero asegura sumar, como mínimo, el punto que regala la Liga a cada equipo cuando empieza. Una perogrullada, sí, pero también el abc del fútbol, sobre todo para los equipos modestos, que difícilmente pueden fichar a killers que revienten las estadísticas goleadoras.

Osasuna, por ejemplo, que pese al espectacular rendimiento de Oriol Riera no destaca especialmente por su capacidad realizadora. De ahí que los rojillos acostumbren a insistir en la importancia de proteger a su portero, hasta el punto de que el orden de prioridades, en el camino a la permanencia, está encabezado por el rosco, por el cero en su portería. «Nuestro objetivo es encajar lo menos posible -aseguraba ayer Alejandro Arribas-. Eso te asegura por lo menos un punto».

Aunque no necesariamente más, igual que encajar goles no anula las opciones de victoria, aunque las reduzca. De hecho, de los siete triunfos que ha celebrado Osasuna esta temporada, solo en cuatro ha dejado su portería a cero. Pero Arribas prefiere no correr riesgos. Y, recuerda, por ejemplo, el último encuentro frente al Getafe, en el que el equipo no estuvo «brillante» pero sí práctico. Es decir, certero de cara a puerta y, sobre todo, defensivamente intenso.

«Los 14 jugadores que jugaron estuvieron impecables defensivamente -se felicitó el madrileño-. El equipo estuvo muy serio, trabajó mucho y en defensa estuvo muy bien. Si además haces algún gol...». Lo agradece especialmente un equipo al que le cuesta horrores remontar marcadores adversos -«no me acuerdo ni si lo hemos hecho alguna vez todavía, sonreía Arribas-, pero que sí sabe manejar los partidos cuando se le ponen a favor. Algo que se vio contra el Getafe, cuando «no estuvimos afortunados al principio, también porque el campo estaba rápido y se nos iban algunos controles y algunos pases, pero en cuanto metimos el primero nos pusimos muy serios atrás. Se ha visto que con el marcador a favor sabemos jugar bien y por eso nuestro primer objetivo es dejar la puerta a cero», insistió.

Más aún ahora que ya no solo se disputan los puntos, importantísimos -«con lo apretada que está la Liga, que estamos siete u ocho equipos en dos puntos, de haber perdido el domingo nos habríamos quedado al borde del descenso», recuerda el zaguero rojillo-, y también «el golaverage, que es algo que también hay que tener en cuenta por si acaso. Con el Getafe lo dejamos a nuestro favor» y ahora toca intentar hacer lo mismo con el Elche, otro rival directo que solo aventaja a los navarros por, precisamente, la diferencia de goles. «Intentaremos ganar o, en el peor de los casos, empatar», aseguró Arribas que, pese a la «importancia» del partido, no quiso oir hablar de «finales». «Quedan 16 jornadas», recordó.

Queda tiempo y, además, Osasuna está en buena línea, como quiso destacar el zaguero. «Perdimos dos partidos -recordó, en referencia a las derrotas ante Athletic y Villarreal- pero era contra dos equipos que pelean por la Champions y veníamos de enlazar cinco partidos sin perder, que creo que no había pasado algo así desde que estoy aquí. Por eso el equipo siguió adelante y con la misma confianza. Porque sabemos que lo estamos haciendo bien, que el equipo va bien y que todo el mundo firmaba a estas alturas estar como estamos, en la pelea, sobre todo despues del principio que hicimos».