UPN suplica ayuda a Rajoy porque, si cae Barcina, «se fractura España»
Si cae el Gobierno de UPN, «se fractura España» y, por ello, el diputado Carlos Salvador rogó a Mariano Rajoy que mantenga a Yolanda Barcina en el poder. El inquilino de La Moncloa le recompensó negando la corrupción en Nafarroa.
Si cae el Gobierno de Yolanda Barcina, «se rompe España». Ese fue el mensaje lanzado ayer desde la tribuna del Congreso por Carlos Salvador. El diputado de UPN aprovechó su intervención durante el «debate sobre el estado de la nación» para suplicar ayuda al presidente español con el objetivo de que Barcina se mantenga en el poder. También, de reojo, apuntaba hacia el secretario general del PSOE porque, en definitiva, será Alfredo Pérez Rubalcaba quien tenga la última palabra en relación a la moción de censura del PSN. Del inquilino de La Moncloa arrancó adhesión absoluta y de la bancada del PP la única ovación no dirigida a un correligionario. En el grupo parlamentario del PSOE se eludía la cuestión. La réplica llegó desde Amaiur y Geroa Bai. Tanto Xabier Mikel Errekondo como Uxue Barkos defendieron que la decisión la tienen los navarros.
«En Navarra no hay corrupción», proclamó con rotundidad Mariano Rajoy en su respuesta. El presidente español dejó patente su sintonía con Salvador, le dio la razón en todo y consideró que «hay quien quiere llegar al poder por cualquier procedimiento», sumándose a la campaña lanzada desde UPN para vincular la crisis política desatada en Nafarroa a un pacto entre PSN y EH Bildu, y no al «caso Goicoechea» y los sucesivos escándalos que salpican al Ejecutivo de Barcina. También insistió en que trabajará «por una Navarra foral y española».
Previamente, Salvador había aprovechado sus cinco minutos para descartar las irregularidades en la Hacienda foral y centrarse en el discurso del miedo hacia el abertzalismo. «En Navarra no hay corrupción», insistió, llegando a afirmar que «conocemos las urgencias de ETA». Con un discurso incluso más a la derecha, siguió la línea marcada hace una semana por miembros del Gobierno español como Jorge Fernández Díaz, ministro del Interior, que dijo que «Navarra es estratégica para España». «Hablar de Navarra es hablar del futuro de la nación (española)», incidió, presentando un panorama épico de «combate entre la libertad y el gulag».
Literatura sobre filtraciones
Para hilar su argumentación, el diputado de UPN echó mano de un supuesto documento de EH Bildu filtrado por «Diario de Navarra» en el que se hacía mención al objetivo de toda fuerza política que está en la oposición, que no es otro que desalojar a la formación del gobierno para poner en marcha otras políticas. Esto, en la literatura de Salvador, se convirtió en un informe «secreto» que ligó con el «pacto de Loiola» y con encuentros entre el PSN y «nacionalistas moderados». Pese a que Salvador necesitaba seducir al PSOE en su objetivo de que sea Ferraz quien frene la posible moción de censura, no escatimó en críticas en su contra. Así que encontró mejor público en Rajoy, a quien pidió «claridad ante el desafío separatista» y emplazó a mostrar «compromiso con Navarra», en nombre de ciudadanos «perplejos por cómo se quiere sacrificar Navarra en el altar de los intereses de los nacionalistas». «Contra Navarra vale todo», argumentó.
Frente a la defensa del régimen actual compartida por Salvador y Rajoy, Amaiur y Geroa Bai realizaron otra lectura. En primer lugar, Xabier Mikel Errekondo, quien censuró la «apología de la corrupción» exhibida por las muestras de apoyo del presidente español a su homóloga navarra. Y eso que el inquilino de La Moncloa todavía no se había lanzado a mostrar su inquebrantable adhesión a Barcina. «Lejos de exigir la inmediata depuración política, ha preferido amparar a la presidenta dándole ánimos e instándole a ser fuerte», criticó, estableciendo un paralelismo entre estos mensajes y los que remitió al extesorero del PP Luis Bárcenas cuando saltó el escándalo sobre la financiación irregular. «Quieren usurpar la palabra a la ciudadanía navarra y decidir su futuro desde Madrid», concluyó.
Recursos al TC y más agravios
En la misma línea, Uxue Barkos, portavoz de Geroa Bai, cuestionó la escasa «vocación de búsqueda de la verdad» exhibida por UPN y PP. «Vienen a decirnos que más vale corrupta que rota. Nos negamos», sentenció. En su intervención, la diputada aprovechó para hacer balance de dos años de legislatura de Rajoy en relación a Nafarroa: «Reducción del 80% en las inversiones, promesa incumplida de presencia en el Ecofin, negativa a negociar el techo del déficit, catorce recursos de inconstitucionalidad [contra normas aprobadas por el Parlamento navarro], los lamentables capítulos sobre el supuesto informe de la Guardia Civil o paralización de infraestructuras», enumeró, para exigir «un poco de respeto» y recordar que «Navarra es sujeto político por derecho».
Tras el debate, hoy se votarán dos resoluciones sobre la crisis política abierta en Nafarroa. La primera, a propuesta de UPN y en la línea de lo expuesto por Salvador, mezcla la demanda del «trabajo contra ETA» con el intento para evitar «un cambio del estatus jurídico de Navarra como paso previo a la fractura de España». La segunda, propuesta por Amaiur, pide «que sea la ciudadanía navarra y sus representantes quienes resuelvan de una forma libre y democrática la crisis institucional».
El PP se aferra al «no» al nuevo estatus
Tras dejar entrever que la Constitución española podía «ser modificada» durante el debate entre el presidente español, Mariano Rajoy, y el portavoz de CiU, Josep Antoni Duran i Lleida, el propio jefe del Ejecutivo cerró ayer esa vía apelando a la «prudencia», lo que implica un nuevo «no» a posibles cambios de estatus. Además, el PP presentó una propuesta de resolución, que se votará hoy, que pretende blindar especialmente los artículos de la Carta Magna en relación a las reclamaciones soberanistas. Ayer, tanto PNV como Amaiur abordaron la cuestión. En primer lugar, Aitor Esteban defendió la ponencia sobre autogobierno del Parlamento de Gasteiz asegurando que no hay «líneas rojas» más allá de un acuerdo «lo más amplio posible». Posteriormente, Xabier Mikel Errekondo, en el contexto del debate sobre Nafarroa, consideró que uno de los grandes problemas de Madrid está en su negativa a «respetar el derecho democrático a decidir libremente nuestro futuro», citando como ejemplo el caso escocés. A.P.
La comisión de investigación votará mañana sus conclusiones
La comisión de investigación del Parlamento navarro concluirá su labor mañana, debatiendo y votando, a partir de las 11.00, el dictamen de conclusiones. Llegados a este punto, el PSN debe decidir si sigue adelante, tal y como anunció su secretario general, Roberto Jiménez, con la moción de censura para quitar a Yolanda Barcina de la Presidencia del Gobierno navarro y convocar elecciones anticipadas.
El presidente de la comisión, Juan José Lizarbe (PSN), dio por seguro ayer que los trabajos de la comisión «derivarán en la exigencia de responsabilidades políticas». «Es evidente que la comisión de investigación ha sido útil», añadió.
Pese a la insistencia de los portavoces de UPN y PP, Carlos García Adanero y Enrique Martín, en destacar que no ha quedado acreditado ningún delito de corrupción, los demás grupos con presencia en el Parlamento subrayaron que han quedado en evidencia prácticas incompatibles con la continuidad de Barcina al frente del Gobierno.
Las conclusiones de la comisión se aprobarán mediante el sistema de voto ponderado, por lo que, una vez más, si se unen todos los grupos de la oposición (PSN, Bildu, Aralar-NaBai, I-E y Geroa Bai), podrán sacar adelante sus tesis y proclamar que las actuaciones de Barcina y Lourdes Goicoechea en cuestiones como el retraso de las devoluciones del IVA, la petición de información sobre retribuciones de la CAN o la mediación en inspecciones de Hacienda son reprobables políticamente.
No se puede olvidar que la comisión de investigación es un órgano que analiza cuestiones políticas. Mientras, en el ámbito judicial ya hay presentadas dos denuncias por estos hechos en el Tribunal Supremo español de la mano de Kontuz y ELA.
En este sentido, el representante del PSN en la comisión, Pedro Rascón, comentó que hay que pedir responsabilidades políticas y que la Fiscalía debe investigar un presunto delito de tráfico de influencias.
En cualquier caso, a nadie escapa que la decisión última sobre seguir adelante o no con la moción de censura contra Barcina no la tomará el PSN en exclusiva, ya que, como es norma, deberá contar con el visto bueno de la dirección federal del PSOE. Martxelo DÍAZ
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