La del último domingo de mayo se ha convertido en la fecha más comentada en nuestro país. Aunque no lo haya sido por la convocatoria de las elecciones al Parlamento Europeo, resulta que finalmente serán estos comicios los que marquen la jornada del 25M, también en Nafarroa Garaia.

Ese día podrán acercarse a las urnas todas las ciudadanas y ciudadanos de este país con derecho a voto. Si bien es probable que no llegue a votar ni la mitad del censo, eso no resta importancia a la lectura que se hará de esos resultados.

En Lapurdi, Nafarroa Beherea y Zuberoa esa cita se ve todavía un poco lejana porque este mismo mes se consumará la doble ronda de las elecciones municipales (los días 23 y 30). Es decir, que están ya en plena campaña. El peculiar sistema de confección de listas hace difícil resumir cómo se presentan las candidaturas de abertzales y de izquierdas, pero nadie duda de que serán determinantes en muchos municipios.

Más difícil será plasmar esa opción política en las europeas, ya que EHBai decidió no concurrir ni apoyar como coalición a ninguna otra de las candidaturas que se presenten en el distrito del Gran Sudoeste.

Lo contrario sucede en Araba, Bizkaia y Gipuzkoa, donde las candidaturas de las formaciones mayoritarias están claramente perfiladas, aunque reste por aclarar, por ejemplo, qué sumas hace EH Bildu con representantes de otras naciones del Estado español, que es la circunscripción única de estos comicios.

Tras el rodeo, vuelvo a poner el foco en el Parlamento de Nafarroa y el 25M. Ese día no se renovará la Cámara, pero tampoco se puede asumir que votar en estas elecciones europeas no servirá para impulsar el cambio tan ansiado. Para dejarlo claro, hagamos la pregunta a la inversa: ¿PP, PSOE y UPN no se juegan nada en estas elecciones? Si creemos a los nefastos gestores de Ferraz y a los analistas políticos que les han aplaudido, sacar adelante la moción de censura con los votos de EH Bildu podía restar mucho apoyo electoral al PSOE en tierras hispanas. Y las encuestas le dan muy poco margen de diferencia con el PP, por lo que los «pocos» votos navarros serán decisivos.

Más claro aún: ¿No tendría ningún impacto que las opciones respaldadas por EH Bildu, I-E y Geroa Bai sumasen más votos que las de UPN-PP-PSN?