EFE-GARA
JUEGOS PARALÍMPICOS DE INVIERNO SOCHI'2014

Santacana, oro en descenso

El donostiarra, que sale de una lesión, disipa las dudas en la primera jornada y hoy afronta el súpergigante.

Jon Santacana, con su guía Miguel Galindo, logró ayer la medalla de oro en la prueba de descenso para discapacitados visuales de clase B-2 de los Juegos Paralímpicos de Sochi. En el centro alpino de Rosa Khutor, el donostiarra marcó un mejor tiempo de 1.21.76 para concluir por delante del eslovaco Miroslav Haraus, plata, y del canadiense Marc Marcoux, bronce.

Cuando hace casi seis meses el esquiador vasco pasó por el quirófano para ser operado de una rotura del tendón de Aquiles, sus esperanzas de acudir a la ciudad rusa en buenas condiciones eran pocas, pero el guipuzcoano, con la colaboración de Galindo, sorprendió a todos ganando la prueba reina.

Santacana obtuvo así su séptima medalla paralímpica, la tercera de oro -además tiene dos platas y dos bronces- en su primera competición de las cinco que tiene programadas en Sochi, y hoy mismo volverá a alinearse en el súpergigante para discapacitados visuales. Su estado de forma era una incógnita a pesar de su buena actuación en su reaparición en la última prueba de la Copa del Mundo, celebrada a finales de febrero en Treviso. En Italia logró subir al podio en tres pruebas, con dos terceros puestos y un segundo.

Santacana fue operado en setiembre del año pasado, tras romperse en Australia mientras hacía ejercicios físicos para participar en una de las pruebas del circuito de la Copa del Mundo que lleva años frecuentando. Durante los últimos meses ha realizado un esfuerzo titánico para poder competir en Sochi. En su caso llovía sobre mojado. Ya sufrió una situación similar en los Paralímpicos de Turín, cuando se rompió la tibia y el peroné a dos meses del inicio de la competición. Aunque pudo participar, no pudo hacerlo en sus mejores condiciones y se quedó sin medallas, después de haber conseguido tres en la anterior cita en Salt Lake City.

Esta vez, tras ser intervenido quirúrgicamente, el equipo médico le dio un plazo de seis meses para poder volver a competir. Después de un mes y medio de rehabilitación en Madrid se trasladó a Zaragoza, donde continuó su recuperación con el fisioterapeuta Guillermo Aladrén.

En enero le realizaron una resonancia de control y le comunicaron que poco a poco podía ir probando los esquís. «Empezamos a principios de enero, pero tenía mucho dolor y cada media hora me tenia que quitar la bota. A mitad de febrero empezamos a competir. Hacer una puesta a punto tan rápida ha sido gracias a los doce años que llevamos juntos Miguel y yo», explicó Santacana.

Una hora después de que se comenzara a competir en las pistas de Krasnaya Poliana, Santacana y Galindo salían en segunda posición para realizar el descenso. Su tiempo, tras alcanzar un pico de velocidad de 120,7 Km/h, fue el mejor con 1.21.76, pero aún restaban nueve rivales por competir y entre ellos todos los favoritos.

Tras casi un cuarto de hora de incertidumbre, en los que Miguel Galindo iba narrando a Santacana el tiempo que iban consiguiendo el resto de competidores, se confirmó primero la medalla y luego que era de oro. El título logrado en Vancouver estaba revalidado. La emoción en las lágrimas contenidas de Galindo y la sonrisa de satisfacción de Santacana reflejaban a la conclusión de la prueba la felicidad de ambos tras meses de duro trabajo e incertidumbre.

Rusia comienza fuerte

El equipo local arrasó en el medallero en esta primera jornada al obtener un tercio de las preseas en juego y lidera la clasificación provisional. Ayer se disputaron doce pruebas entre las distintas modalidades de esquí alpino y biatlón, tras las cuales Rusia conquistó doce chapas -cuatro de oro, seis de plata y dos bronces-. En febrero ganaron los Juegos Olímpicos. La segunda posición provisional es para Alemania, con dos oros; seguida de Ucrania, con un oro, una plata y tres bronces.

«Hemos salido a muerte y ha ido bien»

Jon Santacana y Miguel Galindo, que lograron ayer la medalla de oro en la prueba de descenso para discapacitados visuales de clase B-2 en Sochi, reconocieron que no esperaban «ni en el mejor de los guiones» poder lograr este éxito, teniendo en cuenta que el guipuzcoano todavía no se encuentra del todo recuperado de una grave lesión que le mantuvo más de cuatro meses de baja. «Han sido unos meses complicados. Estar aquí era como un premio, pero cuando llegas y ves que puedes hacerlo bien vas subiendo tu exigencia. Ni en el mejor de los guiones podíamos pensar en esto. En descenso habíamos trabajado muy bien los últimos años, pero no teníamos claro el estado de forma en el que llegábamos».

El vasco apuntó que «hemos sufrido un montón, Miguel me iba narrando lo que iba pasando porque hemos salido en la segunda posición», a lo que apostilló el guía aragonés que «no me lo creía cuando el último bueno que competía iba a más de 70 de nosotros en el intermedio. Hemos salido a muerte, a dar todo lo que teníamos y ha salido muy bien». Santacana reconoció que la pista de Sochi era complicada, pero que arriesgaron en la bajada, lo que finalmente les permitió revalidar el título conseguido hace cuatro años en los Paralímpicos de Vancouver.

«La competición es un juego, tienes que arriesgarte y nos hemos arriesgado. La pista es complicada porque hay varias zonas en las que te despegas, saltas y pierdo a Miguel, pero hay que confiar en lo que sabes hacer. El segundo día de entreno Miguel ya me dijo que no íbamos a hacer nada que no supiéramos ya hacer», afirmó el esquiador alpino guipuzcoano.

«Hemos visto que íbamos primeros y sacábamos 30 centésimas al segundo y quedaban casi todos por bajar. No teníamos muy claro si el tiempo nos iba a valer, de hecho pensábamos que no, pero luego ha sido espectacular», declaró emocionado el guía aragonés tras el mejor inicio posible.