El líder visita San Mamés

Mucho interés propio, cuentas pendientes y jueces de la liga

Los vizcainos quieren mantener su colchón de puntos y vengarse de la eliminación copera, con lo que darían otro vuelco al torneo doméstico.

ATHLETIC - ATLETICO DE MADRID

El partido es de los que hacen afición, de los que merece la pena esperar toda una temporada y por los que más de uno suspiraría para disponer de una localidad en San Mamés. Y aunque de lo que ocurra en el estadio bilbaino puede depender en gran manera el título del torneo de la regularidad, lo cierto es que el Athletic ya tiene suficiente motivación por lo importante que sería cosechar los tres puntos para mantener su privilegiada posición clasificatoria.

A falta de ocho jornadas para la conclusión de la temporada, los de Ernesto Valverde deben apretar el acelerador ante el empuje de algunos rivales con el objetivo de mantener cierto colchón que evite nervios de última hora. La meteórica progresión del Sevilla, conjunto que deberá visitar Bilbo y sobre el que el técnico rojillo ya puso en aviso hace unos días, obliga a mantener el ritmo de puntuación realizado hasta ahora.

Ganar al Atlético no solo confirmaría la solidez de San Mamés, mantenida a lo largo de la presente temporada -11 triunfos de 15 partidos disputados-, sino que consolidaría la moral de un vestuario tiempo hace convencido de alcanzar la previa de Champions, pero que se vería reforzado con una victoria ante el actual líder, quien ha perdido tres encuentros lejos de su casa.

El sustituto de Herrera

El Athletic tiene pendiente, además, su particular vendetta contra los colchoneros, que le han ganado los tres envites en los que se han medido este año, eliminación copera incluida. Los rojiblancos habrán tomado buena nota de los errores que cometieron para que no vuelvan a repetirse.

Valverde tendrá que solventar una difícil papeleta, como es la de sustituir a Ander Herrera, ya que Apelación desestimó el recurso presentado por el Athletic. Las alternativas son variadas, desde colocar en la media punta a Muniain y dar entrada a Susaeta por la izquierda sin variar apenas el once que jugó en Elche, o colocar por delante de los pivotes a Óscar de Marcos.