XALA-ZUBIETA 22

URRUTIKOETXEA-BEROIZ 13

Xala y Zubieta dieron un paso más en su objetivo de reeditar las txapelas ganadas en 2010. La pareja de Aspe mostró una neta superioridad sobre Urrutikoetxea y Beroiz en el frontón Astelena de Eibar, que se quedaron en 13 y a los que se les complica bastante el billete para la final. El delantero de Lekuine volvió a ser el mejor del cuarteto, demostrando que ha llegado en un momento dulce a esta liguilla de semifinales del Parejas.

Los primeros compases del encuentro no resultaron tan desiguales. Los colorados se adelantaron 5-2 en el marcador, en el primer arreón rematador de Xala, variando su repertorio con un saque, una volea, un pelotazo atrás... No obstante, un par de errores de Aitor Zubieta, al que le costó entrar en el partido, otras dos preciosas cortadas de Mikel Beroiz, muy aplaudidas por la grada, y otras dos buenas acciones de Urrutikoetxea dejaban el choque igualado a seis.

Pero la inspiración de los azules se acabó ahí, y ni Urruti ni Beroiz, con más castigo para el delantero, lograron hacer ningún tanto más en todo el partido. Sus rivales aprovecharon el apagón para abrir brecha en el luminoso, encadenando dos parciales decisivos de cinco tantos cada uno. El primero, del 6-6 al 11-6, se dio en una fase del partido en el que Urrutikoetxea estuvo especialmente errático -cometió tres fallos en esa horquilla-, lo que le acabó marcando para el resto de la contienda. En el segundo, del 11-7 al 16-7, los cinco tantos fueron obra de Xala -dos saques, dos remates en el txoko y un pelotazo atrás-, que recuperó el protagonismo de manera realmente brillante.

Decayó el ritmo

Ya con el partido totalmente roto, las dos parejas entraron en una fase de más miedo que valentía. Los colorados, que veían el primer triunfo en su mano, se dedicaron a guardar la ropa, mientras que Urrutikoetxea y Beroiz se fajaron en el intento de lograr el mejor tanteo posible, conscientes de que un resultado abultado podía significar quedarse prácticamente sin opciones de pasar a la final. El paso de Xala por los vestuarios por culpa de un golpe en la contracancha -Urrutikoetxea también se dio otro-, tampoco contribuyó a que el duelo recuperara el ritmo que tuvo al principio.

Así pues, las dos parejas llegarán en muy diferente situación a la segunda jornada, que se disputará el próximo fin de semana. Los perdedores de los dos primeros encuentros, Martínez de Irujo-Barriola (si se recupera el delantero de Ibero) y Urrutikoetxea-Beroiz se medirán el sábado en el Labrit jugándose prácticamente todas sus opciones de estar en la final; los ganadores, Olaizola II-Aretxabaleta y Xala-Zubieta, se enfrentarán el domingo en el Atano III de Donostia en busca de medio billete, como mínimo, para la lucha por las ansiadas txapelas.