Jon ORMAZABAL
Campeonato de Parejas

Irujo genera miedo escénico

Con todas sus limitaciones, la presencia del de Ibero condicionó un partido más cómodo de lo esperado.

MTZ IRUJO-BARRIOLA 22

URRUTI. BEROIZ 8

Jorge Valdano recurrió a Gabriel García Márquez y a su «miedo escénico» para describir el temor del jugador visitante al saltar al estadio Santiago Bernabéu. Martínez de Irujo ejerció un influjo similar en el partido de ayer, ya que con sus limitaciones y sus propias aprensiones, derivadas todas ellas del estado de su mano izquierda, su sola presencia en el Labrit, tras una semana de dudas, condicionó todo el desarrollo del juego y permitió a los de Aspe obtener una victoria que les permite seguir con vida en este Parejas.

Decía el miércoles el propio pelotari de Ibero que la mayoría de las veces que había asumido el riesgo de saltar a la cancha justo de manos le había salido bien y difícilmente podía imaginar el viernes, cuando tuvo que tomar la decisión de jugar o volver a suspender, que el de ayer iba a ser un partido tan plácido para sus intereses.

Y es que, aunque fue evidente que esa zurda está todavía lejos de su plenitud -tiró con miedo algunos golpes, apenas entró una treintena de veces de aire, renunciando a hacerlo de lejos-, el desarrollo del partido le permitió reservarse esa mano y, a priori, da la sensación de que la factura a pagar no será demasiado cara.

Barriola, mucho mejor

Pero sucede que, aún sin estar al 100% de sus posibilidades, Martínez de Irujo es uno de esos pelotaris capaces de condicionar por sí solo un partido y ayer lo volvió a hacer. Porque a él la pelota le salió con mucha chispa de su derecha, pegó un rebote altísimo desde el cuatro en el 9-2, pero además, mientras Barrriola mejoró muchísimo sus prestaciones respecto a la semana pasada en el Ogeta, Urrutikoetxea-Beroiz ni siquiera llegaron a ponerle a prueba esa carencia conocida por todos.

Con un material quizá excesivo, pero ambas parejas utilizaron pelotas muy similares, el de Leitza jugó uno de sus partidos más completos del campeonato, arrimando y dando altura a la pelota, justo aquello en lo que no acertó en el Ogeta, con lo que fue muy superior a un Mikel Beroiz que no acertó en ninguna de esas dos facetas.

Como en Irun, cuando se vio arrollado por un Irujo pleno de acierto, Mikel Urrutikoetxea apenas tuvo protagonismo. Gozó de pocas opciones de entrar y, en las pocas que dispuso, se mostró romo y timorato en el remate, como si rehuyera el cuerpo a cuerpo con el de Ibero.

En esta tesitura, el partido volvió a carecer de la igualdad y la emoción que se le presupone a unas semifinales. Se espera mayor equilibrio en el partido de hoy en Donostia, en el que Irujo-Barriola irán con los de Asegarce, ya que se antoja casi imposible que Olaizola II-Aretxabaleta puedan recibir una paliza para compensar el resultado del Ogeta.