Kutxabank, con el aval de PNV y PSE, sale al rescate
La entidad bancaria se reunía ayer e informaba que nadie ha realizado una petición para solicitar crédito.

Una vez más, PNV y PSE de Bizkaia se comen sus palabras y parecen dispuestos a alargar la vida de un Bilbao Basket que se desangra. A través de Kutxabank, y con el aval de ambas formaciones políticas -poderes en la sombra en el crecimiento del club, con José Luis Bilbao a la cabeza en un lado, y el apoyo, si acaso indirecto, de gente como Patxi López por el otro- más el ayuntamiento bilbaino, se anunciaba la solicitud de un crédito de 500.000 euros para nutrir de fondos los pagarés para saldar una pequeña parte de la deuda con la plantilla y el cuerpo técnico de Bilbao Basket.
La propuesta de ofrecer aval a la entidad bilbaina para abrir una línea de crédito había partido del PNV, con el apoyo a última hora del PSE -sabido es que Bildu apuesta por no subvencionar con dinero público clubes privados y el PP se habría plantado también-, a condición de que el equipo que va hacerse cargo de la gestión del Bilbao Basket presente un plan económico viable y que se sustente en la financiación privada.
«Siempre hemos estado a favor de que el Bilbao Basket sea un proyecto sólido y de que se quede en la ciudad. Hemos manifestado claramente que estaremos detrás de la solución de este aval que necesita el club de medio millón de euros a través de los consejeros en Kutxabank, como entiendo que harán otros partidos. La temporada al final llegará a buen término porque las tensiones de la tesorería actual se despejarán», declaraba el portavos del PSE del ayuntamiento de Bilbo, Alfonso Gil.
La plantilla, expectante
Pero como el vodevil de los hombres de negro no tendrá fin hasta la nota final, durante la tarde ayer desde Kutxabank, que celebraba como cada jueves su reunión del Consejo de Administración, se informaba de que «nadie» del club bilbaino había realizado petición ninguna para solicitar financiación. Eso sí, la concesión de este crédito puede ser concedido sin que el Consejo tenga que aprobarlo. En todo caso, es necesario que se solicite formalmente.
A medio camino entre el hartazgo y la expectación, Roger Grimau también hablaba en nombre de la plantilla. Aprovechando un acto sobre el deporte y el euskera, uno de los pesos pesados de la plantilla de los hombres de negro explicaba que «hablaron con el capitán anunciando que el abono de los pagarés se había retrasado y, como anunciamos en nuestro comunicado, estamos esperando a que se haga efectivo».
Esta concesión de crédito podría valer para ganar tiempo hasta la Junta Extraordinaria del 5 de mayo y salvar la campaña.

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