Aitor AGIRREZABAL EDIMBURGO
Elecciones europeas

Los soberanistas vencen en Escocia mirando a setiembre

Escocia mira hacia la independencia y mira hacia Europa. Las elecciones, celebradas en las islas el pasado jueves, han arrojado un nuevo apoyo a la soberanía, ya que el Partido Nacional de Escocia (SNP) ha vuelto a ser la formación más votada tras desarrollar su campaña electoral con este lema: «Marca Escocia en Europa».

Tal y como se esperaba, la participación fue escasa, al igual que toda la campaña, mucho más centrada en las urnas de setiembre que en las de este fin de semana. El 35,9% del censo de Escocia acudió a votar, una cifra baja pero cinco puntos mayor a la de 2009.

Pese a que los escoceses (pocos) tuvieron su cita con los colegios electorales el jueves, los resultados no se conocieron hasta ayer a última hora, como ocurrió en el resto de estados debido al extemporáneo cierre de los colegios italianos. Del total de 73 escaños europeos que se reparten en el conjunto del Reino Unido, Escocia cuenta con seis. Una representación parlamentaria que podría crecer hasta trece con la independencia.

Seis escaños, cuatro fuerzas

A falta de que hoy se sumen los votos del último concejo, el de las islas del oeste, anoche se daba por seguro que el SNP se ha hecho con dos asientos, los mismos que el Partido Laborista, pero con una pequeña diferencia de votos a favor de los nacionalistas, algo que el primer ministro escocés remarcó como «esperanzador» a menos de cuatro meses del referéndum. El quinto escaño fue para el Partido Conservador, mientras que el sexto y último cayó de lado del partido de ultraderecha y euroescéptico UKIP.

El guiño a la independencia realizado por los nacionalistas escoceses fue compartido por los Verdes, que finalmente se quedaron a dos puntos de los números del partido ultraderechista de Nigel Farage.

Los dos parlamentarios que llevará el SNP al Parlamento Europeo aportarán la voz de un pueblo empeñado en construir su propio futuro a partir del otoño. Al igual que los verdes, el partido gobernante escocés se quedó cerca de conseguir el tercer parlamentario, que finalmente fue para UKIP, la fuerza más votada en el conjunto del Reino Unido.

Los resultados al sur y al norte de la isla ponen de manifiesto dos realidades distintas que se vuelven a oponer. El Ejecutivo de Edimburgo realizó una primera lectura al respecto en la quiso destacar que estos resultados «pueden suponer un nuevo empujón al proceso soberanista».