Pablo CABEZA BILBO
Elkarrizketa
JULIO HERNÁNDEZ
BATERÍA DE ARKADA SOCIAL

«No vamos a dejar de hacer lo que nos gusta porque sepamos tocar mejor»

«Hil orduko bizi» es el segundo disco de Arkada Social tras el regreso de la banda a la escena. Quince años de actividad, salvo una pausa, orientados hacia el punk beligerante y festivo. Con textos donde caben las experiencias personales y las denuncias hacia el sistema, Arkada Social construyen un aguerrido disco donde las melodías ásperas, los estribillos quedones, se mezclan con la caña rockera.

Julio Hernández (Cool Circus, Jukebox) lanza a Arkada Social a toda pastilla y a buen golpe desde su batería. Hodei Beitia (Des-kontrol, The Motherfuckers, Special Crew, Ardi Galduak) complementa con un bajo muy presente y marcón la sección de ritmo, además de emplearse a fondo con su áspera voz. Brian de India (Jukebox) y Mikel Arriaran (Never Surrender, The Motherfuckers) sueltan sus guitarras con clase y habilidad, yendo más allá del típico sonido del punk-rock al incluir solos punzantes que les colocan al lado del protopunk de bandas como MC5. También refuerzan el lado melódico del grupo con fraseados como el de «Seguiremos juntos», un himno que, además, une a la banda con su público. Los cuatro han completado un disco intenso y brillante cercano al punk, al street punk, al Oi! y al rock and roll. Un admirable curro sintetizado en once canciones que tributan homenaje al sonido de «Mondra», centro de tantas y tantas buenas bandas de punk, pero con una visión de gran angular.

Arkada Social tocó el pasado viernes 23 en la sala Clash de Berlín con tanto éxito y fiesta que ya les han contratado para el 1 de mayo de 2015, pero esta vez para un potente festival al aire libre. Más cercanas quedan las actuaciones el 7 de junio en fiestas de Bergara, en Azpeitia ese mismo día a la 1.30, el 15 en Labastida (Araba Euskaraz), el 21 en Laudio y el 28 en fiestas de Altza, Donostia.

Su web: arkadasocial.com; su facebook: facebook.com/arkadasocial y su sello y contratación: www.maukamusic.com.

Algo más de quince años en la escena punk y aún con la energía al máximo.

Desde el inicio hemos tenido claro que sin sufrimiento no habría gloria, por eso bautizamos así nuestro primer disco allá por 2003. Otra de las cosas que cada día tenemos presente es la ilusión, ¡qué importante es hacer las cosas a gusto, joder!

«Seguiremos juntos» es un gran himno. ¡Uno más!

Queríamos que la gente se sintiera identificada al cantarla y la llevara a lo personal, que sintiera que era un poco su propia historia. ¿Nostalgia?, sí, pero con el mensaje claro de que seguimos en la brecha y seguiremos adelante. Sabíamos que sería uno de los platos fuertes. Tras la composición, nos costó dejar de silbar o tararear la melodía los primeros días.

Comenzaron en el 97 en Arrasate, no sabemos cuántas generaciones punk van ya en tan singular enclave.

Nos da igual a qué oleada pertenezcamos, lo que sí podemos asegurar es que haber nacido en Mondra nos ha dado la oportunidad de criarnos escuchando casetes de grupos como Rip, Zakarrak , Puñetazo, Iskanbila...

¿En el punk, en Arkada Social se evoluciona?

¡Por supuesto que hay evolución! Musicalmente algo hemos mejorado con la práctica, ¡menos mal! (risas). Bueno, no solo el mérito es nuestro, tenemos mejores instrumentos y mejores amplis que cuando comenzamos. No suenan solos, de acuerdo, pero ayudan a que sonemos bastante mejor que cuando empezamos. También tenemos ahora una idea más definida del sonido que buscamos. Sabemos lo que queremos e intentamos llevarlo a cabo.

«Hil orduko bizi» está muy bien grabado y se agradece, además, la contundencia equilibrada en todos los planos.

Tienes toda la razón. Le debemos mucho al señor Haritz Harreguy en este sentido. Estamos encantados con él y nos gustaría volver a contar con él en el futuro. Es una persona que te da una confianza de la hostia. Te da esa sensación de tranquilidad, de saber que estás en buenas manos y de saber que al final todo acabará saliendo de puta madre.

Parece que ser más músicos no contradice el hecho de ser una banda de punk-rock.

Seguimos y seguiremos a lo nuestro. No vamos a dejar de hacer lo que nos gusta porque sepamos tocar mejor que antes.

¿Y el regreso?

Estuvimos dos o tres años inactivos y aunque no pensábamos regresar, si lo hemos hecho es porque el cuerpo nos lo pedía. Lo que no era normal es que todos estuviésemos deseando volver a tocar, llamémosle mono, y que no lo hiciésemos por ser esclavos de lo que habíamos decidido en el pasado.