Las gestiones de los integrantes de los consejos de administración de BBK y Caja Vital, y también de los rectores de Kutxabank, están siendo frenéticas en los últimos días al objeto de concluir durante este mismo mes la conversión en fundaciones bancarias de las dos cajas.

Durante estos días, las reuniones entre partidos y las consultas telefónicas se han acelerado casi frenéticamente con el objetivo de que las transformaciones de esta dos cajas queden cerradas antes del verano.

Sin embargo, este proceso lleva un ritmo más lento en Gipuzkoa, donde la contestación al proceso de privatización de Kutxabank está siendo mayor. De hecho, el plazo que se han fijado los rectores de Kutxa, encabezados por Xabier Iturbe, concluiría bien entrado el otoño. En este caso, PNV, PP y PSE están condicionados por el peso que EH Bildu tiene en este herrialde que les obliga, al menos aparentemente, a contrastar opiniones con la coalición soberanista.

Precisamente, EH Bildu tiene previsto presentar hoy en en Bilbo una propuesta de «acuerdo de país» dirigida a otros agentes políticos así como a organizaciones sindicales y sociales para tratar de detener el proceso de privatización de las cajas y «garantizar su gestión pública y democrática».

Movilizaciones mañana

Por su parte, la Plataforma en defensa de un Sistema Financiero Público Vasco y contra la Privatización de Kutxabank, reiteró ayer su llamamiento a participar en la cadena humana que unirá mañana las sedes del PNV y Kutxabank en Bilbo, para denunciar que la conversión de las cajas en fundaciones bancarias «se quiere tomar sin clarificar el futuro de Kutxabank».

La protesta comenzará a las 10.30 de la mañana de las inmediaciones de Sabin Etxea, en los Jardines de Albia, y concluirá ante la sede de Kutxabank, en Gran Vía.