Mañana el pleno de las Juntas Generales de Bizkaia debate en Gernika sobre el fraude fiscal, sobre hacer o no públicas la lista de evasores, pero también sobre la responsabilidad de los mandatarios de Diputación en las consecuencias que van a tener las vacaciones fiscales que otorgaron a cientos de empresas. Irune Soto asegura en nombre de EH Bildu que «falta voluntad política para erradicar el fraude fiscal» y acusa a la Administración que preside José Luis Bilbao (PNV) de ir «a rebufo» de Gipuzkoa.

¿Qué ha propuesto EH Bildu para reducir o terminar con el fraude fiscal?

Entre otras cosas, el intercambio de información entre las haciendas forales que, aunque el PNV estuvo en contra, al final, se hará. No será on line, pero es un avance. Lo están vendiendo como la gran noticia del año, pero chirría un poco que en 2014 nos vendan que se va a empezar a intercambiar datos fiscales. ¿Qué han hecho hasta ahora? Lo venden como si fuera producto del pacto que han firmado con PSE y PP, pero la realidad no es así, porque hasta ahora se han negado.

¿A qué se ha debido el cambio?

La Diputación foral de Bizkaia en temas fiscales actúa a rebufo de lo que viene de la Diputación de Gipuzkoa. Han sido la presión social y la presión de la Diputación vecina los que les ha obligado a tener que moverse. Es verdad que hay que mejorar los medios y ampliarlos. Hacen falta medidas especiales para poder combatir el fraude en esas bolsas donde creemos que más se mueve o, por lo menos, donde tenemos sospecha de que así ocurre.

¿La Hacienda de Bizkaia conoce esas bolsas de fraude?

Sabe cuáles son esas grandes bolsas de fraude. Tendría que perseguirlo. Hemos propuesto un censo de grandes defraudadores, para que quienes lo hagan se lo piensen dos veces. En Gipuzkoa ha salido y ha dado resultados. Y hemos propuesto otra lista de contribuyentes potenciales de defraudar. Es decir, poner la lupa allí donde se ve un gran foco. También queremos influir en la sociedades de promoción empresarial, porque en Gipuzkoa los datos confirman que es una bolsa de fraude. Hemos propuesto que se incluyan en el plan contra el fraude. Este debate no se ha producido todavía en las Juntas Generales porque el presidente de la comisión es del PNV, y lo está retrasando de una manera deliberada e incomprensible.

¿De qué cantidad se puede hablar en estas sociedades?

En Gipuzkoa se han detectado 68 millones de euros de fraude en estas sociedades. En Bizkaia, la lógica nos dice que habiendo muchísimas más, seguramente el fraude que debiera de aflorar tendría que ser superior. El diputado de la Hacienda Foral de Bizkaia, José María Iruarrizaga, nos ha respondido que no considera que el dato sea significativo, ni ve la necesidad de tener que incluir esta modalidad en ese plan contra el fraude. Es otra sombra más de la actuación en política fiscal del PNV al frente de la Diputación, como el hecho de que el diputado general José Luis Bilbao y el de Hacienda se hayan negado a ir al Parlamento vasco a dar explicaciones sobre su política contra el fraude fiscal. Esa negativa ya nos dice demasiadas cosas en su contra.

¿Qué fraude existe en Bizkaia?

Hay muchísimo. Al diputado de Hacienda le hemos pedido en muchas ocasiones que sea más transparente a la hora de hacer públicos los datos del fraude fiscal. Hace dos años debieron rectificar una campaña porque atribuyó el fraude aflorado como si se hubiera recuperado esa cantidad, que no es así. En 2013 se han aflorado 467 millones, que es el presupuesto de este año del Departamento de Acción Social. ¡Lo que se podría hacer con ese dinero! En Gipuzkoa, afloraron 397 millones y en Araba 123 millones. En proporción, en Bizkaia es muchísimo menos. Otro tema importante también es la elusión fiscal que se produce. Dos ejemplos muestran esa importancia: en el Impuesto de Sociedades, que se han hecho bastantes cambios no sustanciales, se han mantenido esos incentivos para esas sociedades que les ayudan a desgravar más de lo que consideramos justo y, al final, esas vías de elusión fiscal siguen abiertas; y en el tema del Impuesto de Patrimonio nos preguntamos si se hacen las inspecciones suficientes o no.

¿Por qué lo dice?

Según los datos de la Hacienda de Bizkaia, en 2013 se detectó un fraude de 1,6 millones de una recaudación de este impuesto de 76 millones. En Gipuzkoa, en este impuesto que allí es de grandes fortunas, se han detectado 5 millones de fraude de 50 millones recaudados. Bizkaia no hace todo lo que debería.

¿Cuál es la radiografía del defraudador de Bizkaia?

En Gipuzkoa cuando la Diputación hace públicos los datos ofrece más detalles y pistas de lo que ocurre; no es así en Bizkaia, porque el nivel de desglose no es tan significativo y, cuando preguntas, no te responden. Tenemos que pensar que el perfil del defraudador de Gipuzkoa se puede asemejar al de Bizkaia. Es curioso que en Bizkaia ha habido años que se ha puesto el foco en el sector de las chatarrerías y peluquerías. A veces puede sonar a chiste, porque conociendo todos dónde pueden estar las bolsas del mayor fraude fiscal suena a cachondeo o, verdaderamente, quieren desviar el foco de atención.

¿Quienes son los más defraudadores, entonces?

En Bizkaia en 2013 afloraron 467 millones en fraude fiscal, de esos 215 millones correspondían a IVA y 175 millones, al Impuesto de Sociedades que, además, tiene abiertas bastantes vías de elusión fiscal, como ya he comentado. Está claro que el perfil de los más defraudadores no se encuentra en rentas medias y bajas; nos controlan con el IRPF. Las bolsas grandes todos sabemos dónde habría que mirar. Quien más defrauda es quien más dinero tiene, quienes más recursos poseen para poder eludir, mover y llevarlo a otro sitio; y poder multiplicarlo, muchas veces, de forma ilegal.

El sindicato de funcionarios de la Hacienda española, Gestha, concretó hace dos años que el fraude fiscal llegaba al 20,6% del PIB, lo que suma más de 13.000 millones, y más de la mitad son Bizkaia. ¿Qué opina?

¿Dónde queda el resto, esos 6.500 millones que corresponden a Bizkaia y que están por ahí? Es escandaloso. La mayoría de los expertos fiscales hablan de ese nivel de fraude. Si son de hace dos años, todo apunta que 2013 y 2014 serán peores. Con las declaraciones autocomplacientes de Bilbao e Iruarrizaga parece que se están riendo de nosotros, cuando deberían sentir vergüenza de lo poco que aflora, y de lo poquísimo que se recupera para las arcas públicas. Los términos en que nos movemos desesperan bastante.

Iruarrizaga se esconde siempre pidiendo a los ciudadanos que le digan dónde está el fraude, ¿qué piensa?

Es bochornoso. Corresponde a las instituciones hacer esa labor. Están nerviosos porque se quedan a la cola. No tienen respuesta ante lo que demanda la sociedad y se mueven a rebufo de Gipuzkoa, que les está forzando a dar esos cambio tímidos.

En cuanto a las vacaciones fiscales, ¿que plantean en el pleno de este miércoles?

Hacemos una propuesta de como debería repartirse el pago de la multa: el 70%, al Gobierno vasco; y el otro 30%, a las diputaciones mediante un consenso. Ese reparto es el que se utiliza financiación anual. Interpelaremos de forma directa a Bilbao pidiéndole responsabilidades. La sentencia de 2006 del Tribunal Europeo que les decía cuanto debería devolver el dinero, deliberadamente decidieron retrasar la recuperación de las ayudas. Mandaron un camión con 10.000 folios desordenados a la UE para decir que somos omnipotentes. El caso es que los tendremos que pagar nosotros a escote y aquí nadie dimite por esa mala gestión. Le preguntaré si está dispuesto asumir alguna responsabilidad.