Tiene hasta nombre de actor y sin duda va camino de convertirse en personaje sanferminero. Visto lo visto, ni en un casting hubiera conseguido la Policía Municipal un sparring mejor para el estreno de la ordenanza sancionadora.

El tal Gareth Cooper fue la primera víctima de las nuevas multas por pasar la raya de Santo Domingo, el día 7. Lo ha encajado con deportividad pasmosa. Entre otras cosas porque ha sido policía 31 años, según confirmaba ayer en TVE minutos antes del encierro. Solo se queja de que el rótulo que avisaba del límite esté en castellano y euskara, no en inglés ni otras lenguas.

Más dudoso parece que se le pueda llamar corredor. Explica que lleva nueve años participando en el encierro. Lo que es el día 7, después de saltarse la raya, no tenía mucho que ver con correr. Cooper se limitó a echarse a un lado al paso de la torada. Responde, por tanto, a otro perfil: el de los cientos de personas que entran al encierro solo para ver los morlacos de cerca, precisamente una de las cosas que teóricamente pretende evitar la nueva ordenanza.

El caso es que al Ayuntamiento le ha venido de perlas el personaje y su talante. Y Cooper parece hasta feliz con sus cinco minutos de fama... a 200 euros.