Israel continúa el baño de sangre y ataca otra escuela de la ONU
Israel continuó el baño de sangre en Gaza, sobre todo en la ciudad de Rafah, pese al movimiento de tropas a zonas menos expuestas. Además, volvió a bombardear una escuela-refugio de la ONU cuya localización había sido comunicada al Ejército israelí hasta 33 veces.
Israel sigue inmune a la indignación internacional por las matanzas en Gaza y ayer continúo atacando a la población pese al movimiento de sus tropas. El repliegue sirvió para que el Ejército israelí se retirara de algunas zonas ocupadas, pero no salió totalmente de la Franja ni dejó de bombardear. «Volvemos a zonas menos expuestas, pero seguimos en posición de combate para cualquier circunstancia», dijeron fuentes militares.
Y de nuevo puso en su objetivo una escuela de la ONU que está sirviendo de refugio a la población que ha perdido o ha huido de sus hogares. Al menos diez personas murieron en este bombardeo de una instalación supuestamente inviolable, que acogía a 3.000 refugiados, según la agencia de Naciones Unidas para los refugiados palestinos (UNRWA). Su localización había sido transmitida a las fuerzas israelíes al menos 33 veces; la última, una hora antes del ataque. En esta ocasión, Israel asumió haber disparado, aunque lo justificó alegando que supuestos «terroristas de la Yihad Islámica» circulaban en motocicleta junto a la escuela. Pero los bombardeos se ensañan con escuelas, hospitales, mezquitas y viviendas mostrando que el objetivo último es más buscar un población derrotada en un territorio arrasado que acabar con los túneles de Hamas.
Es al menos la quinta vez que una escuela de la ONU es bombardeada y la tercera en diez días con víctimas mortales. Con anterioridad, un treintena de palestinos murió en ataques a escuelas en Beit Hanun, el 24 de julio, y en Jabaliya, el 31 de julio.
«Es un escándalo desde el punto de vista moral y un acto criminal», así como una «nueva violación flagrante del derecho humanitario internacional», se indignó el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon. EEUU dijo estar «consternado» por un bombardeo «desgraciado» y pidió a Israel que «hiciera más» para evitar la muerte de civiles.
Pero ni Ban Ki-moon ni Washington exigieron responsabilidades a Israel ni han llevado a cabo ninguna acción. Y, desde el acto de conmemoración del inicio de la I Guerra Mundial, el presidente francés, François Hollande, asimiló lo que ocurre en Gaza con lo que ocurrió en 1914 y puso la reconciliación franco-alemana como «ejemplo» para el conflicto palestino-israelí.
Caos entre ruinas y cadáveres
Residentes que han huido de Rafah relataron que los bombardeos por tierra y aire alcanzaron en las últimas horas del día a grupos de residentes que se encontraban sentados en las afueras de la ciudad, además de decenas de viviendas. Lejos de aliviar el ataque con su cambio de posiciones, Israel provocó ayer la muerte de otras 71 personas, sobre todo en el sur de la Franja. Un corresponsal de France-Presse informó de escenas de caos, con trabajadores de servicios de rescate luchando como podían para sacar a los heridos en medio de palestinos corriendo sin aliento entre charcos de sangre con niños en brazos.
En las saturadas morgues, las imágenes de bebés muertos, colocados en neveras para alimentos, y los llantos de los parientes de la familia al-Ghul, diezmada por un ataque a su vivienda, reflejaban la suerte de la población de Rafah desde el viernes.
El Ministerio de Salud de Gaza indicó que, desde que las tropas israelíes iniciaron sus operaciones en Rafah, más de 200 palestinos han muerto y 500 han resultado heridos. Uno de los principales hospitales de la población fronteriza con Egipto ha sido evacuado después de que la artillería israelí bombardeara amplias zonas aledañas. La ofensiva a gran escala, que se inició el pasado 8 de julio, ha acabado con las vidas de 1.834 personas en Gaza, y herido a 9.500, según el Ministerio de Sanidad de la Franja, que recordó que dos tercios de las víctimas son civiles.
El intenso ataque de Rafah comenzó cuando Israel anunció que uno de sus soldados había sido secuestrado y otros tres muertos en combate. Hamas negó haber capturado a ningún soldado desde un primer momento. Ayer, Israel reconoció finalmente que había muerto.
La ONU alertó de que, después de casi un mes de bombardeos en un territorio cerrado, un «desastre sanitario de gran envergadura» está a punto de producirse entre los 1,8 millones de habitantes atrapados.
Palestinos en El Cairo
Pese a los peticiones de cese el fuego, Israel anunció el sábado que la operación seguiría según sus propios intereses y que no negociará ninguna salida con Hamas. Por ello no ha enviado ningún representante a El Cairo, donde ayer acudieron los principales grupos palestinos, que consensuaron un documento con sus reivindicaciones.
Estas demandas -que acordaron en una posición común desde Al Fatah a la Yihad Islámica- se basan en el cumplimiento de compromisos anteriores: el alto el fuego, la retirada de las fuerzas israelíes de Gaza, el desbloqueo de la Franja y la liberación de presos, entre ellos los que aún están encarcelados y debían haber sido puestos en libertad tras el acuerdo de 2011. Respecto al levantamiento del bloqueo de Gaza, insistieron en los derechos de pesca de 12 millas náuticas y la supresión de la conocida como «zona de seguridad», impuesta por Israel en el mar.
Egipto recibió la propuesta con la intención de trasladarla a sus aliados israelí y estadounidense.
Niños palestinos, muertos, mutilados o aterrorizados
«Los niños nunca comienzan las guerras pero son los que están siendo asesinados, mutilados, traumatizados, obligados a dejar sus casas, aterrorizados y permanentemente asustados», denuncia Save The Children. Y en Gaza el horror que viven no tiene tregua: Una de cada cuatro víctimas mortales de los bombardeos sobre territorio palestino -suman ya más de 1.800- era menor y son, al menos, 194.000 los que necesitan ayuda sicológica.
«Muchos han visto morir a sus familias, están heridos o desplazados. Más de 100.000 niños y niñas han tenido que dejar sus casas con sus familias, la mayoría refugiados en las escuelas donde deberían empezar el curso después de verano», pese a que tampoco son un refugio respetado, ya que las bombas israelíes han dañado más de 130 centros escolares; el último, ayer mismo.
La saña de Israel ha hecho pedazos la infancia de los niños en Gaza. «Miles, de luto por sus padres y cientos, enterrados con sus familias», resalta Save The Children, que alerta sobre el peligro añadido de los «numerosos restos de explosivos» dejados por los bombardeos, que también han destruido instalaciones sanitarias.
Esta devastación restringe de forma extrema el acceso a la atención sanitaria en un momento en el que «se ha duplicado el número de partos prematuros debido al trauma de las madres». Se estima que hay 45.000 mujeres embarazadas en la región, de las que 5.000 están desplazadas, según explicó la ONG.
También en Cisjordania la población palestina precisa ayuda sicológica, como advierte Médicos Sin Fronteras (MSF), debido a que los cientos de irrupciones violentas en domicilios y las detenciones, están erosionando el ya frágil bienestar sicológico de los ciudadanos palestinos. Ansiedad, estrés postraumático, trastornos sicosomáticos y sensación de acoso son algunos de los problemas que presentan los pacientes, muchos de ellos niños.
La coordinadora del proyecto de MSF en Hebrón, Srijeeta Verma, asegura que «la escalada de violencia ha tenido un enorme impacto en los palestinos» y que los niños «son testigos de la violencia que están viendo cómo arrestan a sus padres o cómo destruyen sus casas». GARA
Dan por anulado el viaje de las cooperativas agrarias vascas
Después de que desde distintos ámbitos de la sociedad vasca se reclamara que se diera marcha atrás en esta iniciativa -en las páginas de GARA lo hacía ayer Koldo Alzola en un artículo de opinión y también quedó reflejado en el editorial-, la Federación de Cooperativas Agrarias de Euskadi indicó que el viaje a los kibutz israelíes al que iban a acudir como invitados varios parlamentarios de la Cámara de Gasteiz está en el aire debido a la situación de conflicto que se viven en la Franja de Gaza.
Según adelantó ayer a la agencia Efe Iñaki Nubla, secretario técnico de la Federación de Cooperativas Agro-alimentarias, la idea partió de este organismo que, cada año desde hace 25, organiza un viaje a lugares con interés para el sector, al que invitan a los integrantes de la comisión parlamentaria que se ocupa de los asuntos de este ámbito para que «esté al día de lo que se está haciendo en otros lugares». La federación cursa la invitación al Parlamento, pero no corre con los gastos del viaje ni de la estancia, cuya cobertura queda en manos de las instituciones y personas que deciden sumarse a la visita.
En el 25 aniversario de su fundación, quería hacer algo especial. Por ello, hace ya un año, se optó por los kibutz de Israel, según Nubla, porque «son modelos exportables de organización social y empresarial». Aunque la ruta preparada no pasa por Gaza, Nubla reconoció que no es el momento de desplazarse «tal y como están las cosas» y, aunque todavía no se ha anulado porque se está a la espera de la decisión final del Consejo Rector de la Federación, dio prácticamente por seguro que se va a suspender.
La visita estaba prevista entre el 27 de agosto y el 4 de setiembre. Solo habían confirmado su asistencia el presidente de la citada comisión parlamentaria, Javier Carro (PNV), y la representante del PP Mari Carmen López de Ocáriz. GARA
