Arnaitz GORRITI
Bilbao Basket Vence ante el Fuenlabrada

Miribilla celebra a lo grande su fiesta de bienvenida

Liderados por Quino Colom en la dirección y con buenos detalles de Hervelle y Marko Todorovic en la zona, los hombres de negro disfrutaron su primer triunfo ante un Fuenlabrada negado en los triples.

BILBAO BASKET 73

FUENLABRADA 54

Ningún nuevo inicio está exento de su background. La presentación de Bilbao Basket, jalonada de imágenes del calvario veraniego y el incondicional apoyo de la afición terminó con un lema apropiado y agradecido: «Eskerrikasko denoi!». Pero los hombres de negro lograron hacer extensiva su gratitud no solo a la presentación, o llevándose el partido ante el Fuenlabrada, sino además contagiando de ganas de juego y de vivir. Pese a los desajustes y el desacierto, los pupilos de Sito Alonso convirtieron el arranque liguero en una fiesta de bienvenida.

El Fuenlabrada, aplaudido a su vez en la presentación, arrancó muy frío, a pesar de que Baron anotara el 0-2. Acto seguido, Bilbao Basket -sin que Mumbrú lanzara a canasta- se escapaba con un parcial de 10-0 que marcaría los primeros compases. En esos primeros minutos Marko Todorovic ofreció detalles como una asistencia por la espalda para Hervelle o un gancho con la mano izquierda tras un baile en el poste bajo.

Pero si alguién brilló fue Quino Colom. El andorrano tuvo un notable comportamiento como base titular, mientras que Raül López se mostró lejos de su mejor versión. Latavious Williams también debutó y lo hizo colocando un tapón y acto seguido palmeando un estrambótico alley oop de Andjusic. Hasta Borja Mendia jugó, y clavó una suspensión de tres metros. Dejan Todorovic -baja en principio- y Borg arrancaron más dubitativos, mientras que Gabriel fue el damnificado, aunque Sito Alonso declarase posterioremente que cuenta con él.

Cuando el marcador registró una máxima diferencia de 13 puntos, 24-11, casi parecía que el triunfo vendría solo, pero los de Luis Casimiro se negaron a ejercer de mera comparsa, de modo que se dedicaron a su labor de zapa para remontar.

Akindele, con su intensidad bajo los aros, hizo rebajar la renta vizcaina de la decena y Jimmy Baron dio un mordisco aún mayor a la diferencia hasta situar a los fuenlabreños a tiro. Por fortuna para Bilbao Basket los fuenlabreños se mostraron negados en el lanzamiento triple -2 de 22-, lo cual siempre dio calma a los hombres de negro.

Mejor con Hervelle y Todorovic

Una calma que en ocasiones perdieron los veteranos Raül López y Alex Mumbrú. El alero se saltó el guión escrito por su entrenador con un par de lanzamientos sin demasiado orden ni concierto, mientras que el Fuenlabrada aguantaba a distancia gracias a varios mates de Clark. Por otro lado, cabe destacar que Latavious Williams empezaba a notar el paso de los minutos, ya que ayer disputaba su primer partido en más de seis meses.

Un tiempo muerto preventivo y varios cambios, con la entrada de Colom, Hervelle y Marko Todorovic, sirvieron para reconducir el partido y dar un estirón que volvió a llevar la renta por encima de la decena. El Fuenlabrada solo conseguía replicar desde dentro, incapaz da anotar ningún lanzamiento triple aun lanzando solo, mientras que Bilbao Basket, aunque muy lejos todavía de cualquier clase de excelencia, realizaba un juego más equilibrado, con la guinda de sumar a través de varios palmeos de Hervelle y un par de canastas más mediante tapones ilegales de su rival.

Una canasta de Mumbrú a la contra ponía el 60-44, a la sazón máxima ventaja, al arranque del cuarto período. Luis Casimiro pedía tiempo muerto ante el griterío y aplauso de los aficionados de Miribilla. Y es que los esfuerzos fuenlabreños empezaban a parecer desesperados, con el añadido de la lesión momentánea de Papamakarios tras recibir un golpe en las costillas.

El partido estaba decidido. Sito Alonso dio más minutos a Williams, de forma que el juego bilbaino cambiaba de estructura con cuatro exteriores, ofreciendo espacio para que el pívot norteamericano bloqueara y continuara. También disfrutaron de minutos y balones Andjusic, Raül López y de nuevo tobias Borg y Mendia, dando opción para que todos los jugadores participaran de la fiesta de bienvenida.

«La afición necesitaba disfrutar del triunfo después de tanto sufrimiento»

«Lo mejor ha sido ver las familias en la grada, la ilusión de sus caras al principio del partido». Sito Alonso miró un poquito más a la grada y algo menos a su plantel para mostrarse satisfecho por el triunfo.

«El partido ha sido lo esperado en cuanto al desgaste físico, o a los recambios que hacíamos porque nos cuesta enlazar 7 u 8 minutos al mejor nivel defensivo. Un partido ganado no indica nada, porque tenemos muchísimas cosas que mejorar. Hemos dado un nivel 65-70%, pero la afición necesitaba disfrutar de la victoria después de tanto sufrimiento», afirmaba.

Sobre el juego exhibido, el de Monzón fue autocrítico, sobre todo con el ofensivo. Por ello, dijo que «la intensidad, cuando físicamente hemos podido, fue lo que más me ha gustado. Las reglas en ataque hay que cumplirlas y no son sencillas. Queríamos terminar en 10-12 segundos y en uno contra uno, sin jugar en equipo. Ahí, la defensa nos ha salvado, porque excepto cuatro o cinco minutos, hemos defendido bien», explicaba.

Aunque incidía en que hay mucho que corregir, sí que se mostró algo sorprendido al confesar que «quizás no esperábamos un partido tan tranquilo».

En el capítulo de nombres propios, alabó el «fantástico» partido de Colom, al que le otorgó cierta «ventaja a la hora de conocer las reglas por la baja tras la operación de Raül -López- y la alternancia de Tobias Borg como base y escolta». Asimismo, destacó el «carácter» de los jóvenes. «Un jugador como Mumbrú baja de nivel si disputa más de 30 minutos, así que espero poder volver a contar con los más jóvenes, porque todos tienen un carácter bastante fuerte». A. G.