Adaptación cinematográfica de uno de las creaciones infantiles más famosas de Otfried Preussler, autor de otros cuentos igualmente conocidos y traducidos como «La pequeña bruja» o «Krabat y el molino del diablo». Los responsables de esta versión de «El pequeño fantasma» han optado por combinar animación e imagen real. El fantasma no es el único ser animado, pues los cuadros y armaduras del castillo de Eulenstein cobran vida por la noche, junto con los ratones o lechuzas de las que toma su nombre en alemán el lugar.

La aventura comienza durante la visita guiada al castillo de un grupo de colegiales, los cuales ayudarán al protagonista a recuperar la blancura de su sábana, quemada y oscurecida por la luz del sol.