A. INTXUSTA

Fracasa el último intento de Polo de eludir el juicio por conducir ebrio

Los juzgados navarros notificaron ayer dos sentencias firmes que suponen dos severos varapalos para el exconcejal de Iruñea Ignacio Polo en su intento de escapar de la acción de la Justicia después de haber chocado con un coche público estando bebido. Un primer fallo confirma que hay pruebas suficientes, tanto por la tasa de alcohol en sangre como por la descripción de su estado, como para que sea procesado por un delito contra la seguridad vial. La segunda desestima las acusaciones que lanzó el exconcejal de Seguridad Ciudadana contra los agentes que le detuvieron ese día.

A falta de que se fije la fecha para el juicio, las cosas no marchan bien para Polo después de que Kontuz denunciara un presunto trato de favor hacia el edil de UPN. La juez María Paz Benito inició una investigación por un presunto delito de encubrimiento por parte de la Jefatura de la Policía Municipal. Tras reunir todas las pruebas del suceso, la juez decretó que finalmente sí que se debería haber llevado a Polo a un juicio rápido y que se equivocaron al solventarlo todo con una mera sanción. El acusado recurrió y ayer se notificó el fracaso de ese recurso.

La segunda fase es clave

En caso de que Polo sea condenado, es previsible que Benito continúe indagando por qué se saltaron el procedimiento ordinario. En ese momento entraría a valorar pruebas que hasta ahora no se han analizado, como una grabación de audio aportada por un agente en la que uno de los mandos confiesa que no se hubiera procesado a Polo por un delito independientemente de cuánto hubiera dado en el alcoholímetro.

Polo estrelló un coche del Ayuntamiento contra otro vehículo cuando desaparcaba. Los agentes que le detuvieron describieron en el atestado que el acompañante tuvo que agarrarlo porque no se tenía en pie, que era incapaz de leer y que las llaves se le cayeron y era incapaz de encontrarlas.