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Kiev y los insurgentes se preparan para una guerra inminente

El Gobierno ucraniano ha reforzado sus líneas de defensa y medios militares en el este del país previendo «acontecimientos imprevisibles» por parte de los insurgentes tras la movilización de tropas y artillería en las regiones de Donetsk y Lugansk, de la que acusa a Rusia. A su vez, los rebeldes dicen prepararse para una ofensiva de Kiev, lo que apunta a una guerra inminente en pleno invierno.

Ucrania anunció ayer que se prepara para combatir a los rebeldes del este del país y concentró armamentos y tropas como reacción a la movilización de tropas rusas que denunció la OTAN. «Hemos visto columnas de equipos rusos, carros rusos, sistema de defensa antiaéreas rusos, artillería rusa, y tropas de combate rusas entrando en Ucrania», declaró el comandante en jefe de la Alianza desde Sofía. La denuncia se suma a la que viene haciendo Ucrania contra Rusia desde el viernes.

Moscú, por su parte, negó que esté concentrando sus fuerzas y criticó «las acusaciones sin fundamento del comandante en jefe de las fuerzas aliadas de la OTAN en Europa, Philip Breedlove, sobre esos supuestos convoyes militares rusos que él `ve' irrumpir en Ucrania» .

«Hemos dejado de prestar atención» a esas «declaraciones regulares que nunca han estado apoyados por hechos», subrayó.

El ministro ucraniano de Defensa, Stepan Poltorak, anunció, el despliegue de más fuerzas militares ante una eventual ofensiva. «Observamos un refuerzo por parte de los grupos terroristas (insurgentes en la terminología de Kiev), así como por parte de Rusia. Esperamos acontecimientos imprevisibles por su parte. Nuestro principal objetivo es prepararnos para el combate».

Doble línea de defensa

Poltorak destacó que ya se están preparando reservistas y se están construyendo una primera y una segunda línea de defensa en ambas regiones. Además, el Gobierno ucraniano anunció el refuerzo de las medidas de seguridad en torno a Mariupol, puerto estratégico en el mar de Azov, en centrales nucleares y gaseoductos. «Kiev ha anunciado en varias ocasiones que se prepara para una ofensiva. Somos nosotros quienes debemos prepararnos para repeler el ataque», aseguró, por su parte, Miroslav Rudenko, vicepresidente del Soviet Supremo de la república popular de Donetsk. Criticó a la OSCE por condenar la movilización de convoyes militares rebeldes y hacer oídos sordos al uso de armamento prohibido y al continuo bombardeo de poblaciones civiles por parte de las fuerzas leales a Kiev.

El secretario general de la OSCE, Lambero Zannier, reconoció que el alto el fuego cada vez es más virtual y que el flujo de armas hacia las zonas rebeldes «podría llevar a una confrontación más abierta».

En realidad la tregua no está siendo cumplida y los enfrentamientos son diarios, sobre todo en torno al aeropuerto de Donetsk, controlado por las fuerzas leales al Gobierno ucraniano. Ayer mismo, Donetsk fue objetivo de disparos de artillería durante varias horas, más intensos que los de los últimos días.

La OSCE, encargada de observar la aplicación del alto el fuego alcanzado en setiembre, había advertido la movilización de varios convoyes de camiones sin matrícula con cañones y lanzaderas de misiles en las regiones de Donetsk y Lugansk. Por su parte, el ministro ruso de Defensa, Sergei Choigu, denunció los intentos de la OTAN de suscitar un sentimiento antirruso en Europa y «el aumento de la presencia militar extranjera en la proximidad inmediata de las fronteras rusas». Así, su análisis «impone la necesidad de mantener las tropas en el distrito militar del Sur (que incluye la frontera ruso-ucraniana) en estado de alerta para asegurar la seguridad del país y de sus aliados estratégicos en el suroeste». «En estas condiciones, una de las tareas prioritarias es formar un grupo militar autosuficiente que reúna a soldados de todo tipo en la península de Crimea», precisó el pasado martes.

Consejo de seguridad

La ONU está preocupada por el riesgo de una vuelta a «la guerra total», en el este de Ucrania, según afirmó el secretario general adjunto para Asuntos Políticos, Jens Andres Toyberg-Frandzen, antes de una reunión de urgencia del Consejo de Seguridad. También señaló como posible escenario«un conflicto estacando que mantendría el statu quo en el sudeste de Ucrania durante años o decenios».

Armenia acusa a Azerbaiyán del derribo de un helicóptero

El Ministerio de Defensa de Armenia acusó a las fuerzas armadas de Azerbaiyán de derribar ayer un helicóptero militar perteneciente a Nagorno-Karabaj, un enclave en Azerbaiyán que está controlado por armenios. Tres personas viajaban a bordo, según las autoridades de Nagorno-Karabaj. Azerbaiyán confirmó el derribo del helicóptero por sus baterías antiaéreas y lo justificó porque el aparato atacó las posiciones azerbaiyanas en la línea de separación entre ambos bandos. Se trata del primer incidente de este tipo desde que se acordó un alto el fuego en 1994 tras una guerra por esta región montañosa en el Cáucaso Sur, pero las tensiones han aumentado en los últimos meses. «Es una provocación sin precedentes que conduce a una escalada de la situación. Las consecuencias para la parte azerbaiyana serán muy dolorosas», afirmó Artsrún Ovannisián, portavoz del Ministerio de Defensa armenio, El responsable armenio tachó de «disparatados» los argumentos de Azerbaiyán de que el MI-24 karabají «tomó rumbo de ataque y atacó las posiciones de las Fuerzas Armadas de Azerbaiyán». «La investigación de los restos confirma que el helicóptero no disponía de equipos militares», precisó. GARA