Jon ORMAZABAL
Semifinal del Cuatro y Medio

Atano XIII se libró esta vez

Irujo reclama cambios para no estar tres semanas sin jugar y Bengoetxea VI cree que el Bizkaia le perjudica.

La sala de prensa del Bizkaia de Bilbo volvió ayer a escuchar las lamentaciones de dos pelotaris tras una elección de material, pero esta vez ninguna de las quejas tuvieron como objetivo las pelotas del cestaño, por lo que Juan Mari Juaristi pudo regresar a casa sin que le pitasen los oídos, ya que los dardos viajaron en otra dirección. Martínez de Irujo, que sigue sin poder despejar sus dudas en una distancia incómoda como ninguna para él, se quejó de la falta de continuidad debido a los aplazamientos, mientras que Oinatz Bengoetxea no se mostró nada cómodo con tener que disputar el partido en el Bizkaia de Bilbo, un frontón que entiende beneficia a su rival.

Asumiendo que el cambio de calendario se ha debido a una fatalidad y que esta misma circunstancia le ha beneficiado en otras tantas ocasiones, el campeón manomanista reclamó cambios en el reglamento, para no jugar solo dos partidos de campeonato en mes y medio, cosa que le podría suceder si consigue el pase a la final.

«Espero llegar bien pero, al final, algo habría que cambiar, porque no es normal que, por mala suerte de Saralegi, que ha sido el mayor perjudicado en este, por supuesto, juegue un partido, a las tres semanas las semifinales y, si me clasifico, la final se jugaría en otras tres semanas; sería mes y medio para jugar dos partidos. Al final, tendrían que hacer algo, parece otro campeonato, porque el cuatro y medio es una modalidad que hay que jugar, hay que meter horas, acostumbrarse a la distancia y jugando cada tres semanas es difícil ponerse», se lamentó.

En este tiempo, el de Ibero ha realizado entrenamientos con casi todos los pelotaris de la empresa que han estado disponibles, -Ezkurdia, Jaunarena, Aritz Lasa, Altuna-, pero echa en falta más continuidad, hasta el punto que hubiera preferido tener que jugarse el pase a semifinales el sábado pasado en la cancha ante Saralegi. «Habrá gente que no me crea, pero quería jugar ese partido. Dependía de mí mismo y además, si se hubiera dado ese resultado del viernes, incluso perdiendo podría haber estado dentro», señaló Irujo, que insistió una y otra vez que el acotado es una distancia a la que no está, para nada, acostumbrado, por lo que necesita continuidad.

Sin quejas con el material, Irujo fue fiel a su costumbre y Bengoetxea VI no puso reparos a unas pelotas suyas que andan más por debajo ni a las de su rival, «algo más grandes y que cogen menos efecto, de más recorrido pero sobre lo previsto», el foco del malestar del de Leitza, sin utilizar una palabra más alta que otra, llegó con la elección del Bizkaia como sede de la semifinal del domingo.

Espina clavada

A pesar de que tras un verano especialmente complicado tras su grave lesión de tobillo cuando preparaba el Parejas, llegar tan arriba es motivo de satisfacción para Oinatz Bengoetxea, el de Asegarce tiene la espina clavada de que Irujo le ha ganado las cuatro veces en las que se han enfrentado dentro del campeonato del Cuatro y Medio. Todos los precedentes tuvieron lugar en el Astelena y el cambio a Bilbo no parece favorecerle para tratar de cortar esa mala racha.

«El frontón de Bilbo es lento y la pelota coge mucha carga. No es un frontón para pelotaris rápidos sino para pelotaris fuertes. La velocidad que quieres imprimir a la pelota se frena bastante porque el frontis es lento, los efectos no los agradece y, por el estilo de juego mío, no es un frontón que me viene bien. Pero la empresa decide y ha tocado aquí por lo que no hay quejas», señaló.

No comparte esta impresión su rival. «No considero para nada que este frontón me beneficie. Para hacer el tanto hay que hacerlo perfecto y, en ese aspecto, yo creo que Oinatz ajusta la chapa bastante más que yo. Ahí creo que no tiene razón».

Pruebas de cara al Parejas en Bergara

A pesar de que da la impresión de que las habas están contadas y de que no habrá demasiadas sorpresas en los nombres de los ocho pelotaris que cada empresa alineará en el Parejas que comenzará al concluir el acotado, desde Aspe mantienen que los festivales como el de esta noche en Bergara servirán como «laboratorio» de cara a tomar las decisiones a este respecto.

«Afortunadamente tenemos un abanico de delanteros y zagueros que perfectamente podrían jugar el Parejas y en los partidos que restan hasta el campeonato queremos que sirvan para cerrar los cuatro dúos que jugarán por parte de Aspe», señalan desde la promotora eibartarra.

El hueco dejado por Titín será quizá el más importante por cubrir y, con la amenaza de Altuna III, Retegi Bi y Joseba Ezkurdia son dos de los candidatos a uno de esos cuatro puestos, entre los que el de Arbizu ya estuvo el año pasado. Ezkurdia tendrá como zaguero a Merino II, que parece fijo en las quinielas, mientras que Beñat Rezusta, campeón del Promoción, tratará de convencer ante los suyos. J.O.