La antepenúltima jornada del año se presenta como una de las más interesantes de la temporada para el fútbol vasco. Athletic y Real tendrán rivales de postín e intereses comunes: un triunfo de las donostiarras será doblemente celebrado.

Y es que el calendario ha colocado al Barcelona consecutivamente en el camino de Real y Athletic. Con los mismos puntos que las blaugranas -aunque peor golaverage y un partido más- y a una semana de visitar el Joan Gamper, qué mayor alegría podrían recibir las rojiblancas que ver morder el polvo mañana en Zubieta al único equipo que les supera en la tabla.

Claro que para que la alegría sea completa, primero tendrán que cumplir con su parte, que es casi tan complicada como la que acomete la escuadra txuriurdin. En la tercera etapa de su maratón de fin de año, el equipo de Juan Luis Fuentes, que no puede contar con Amaia, Saioa y Arene, visita a un Atlético que solo necesita un pequeño impulso para confirmarse entre los candidatos al título. El que le daría, por ejemplo, derrotar a las vizcainas, de las que se sitúan a solo tres puntos. Reconoce Fuentes que, como sucediera ante Levante y Valencia -partidos saldados con cuatro puntos-, el de la Ciudad Deportiva de Majadahonda también será «un partido clave». Y complicado porque «será de igual a igual. Tenemos que estar muy serias porque es un equipo con muchísima calidad ofensiva y además ahora está en un buen momento». Será, en opinión del técnico rojiblanco, un choque que sus futbolistas deberán jugar «sin prisas», como ya hicieron la semana pasada con tan buen resultado.

Por parte colchonera, María León considera al Athletic un rival «a batir» y que «motiva especialmente» porque «es el único equipo que no ha perdido todavía ningún partido. Eso nos da un plus de motivación», insiste. En lo que respecta al partido, lo augura «bonito e intenso y que se decidirá por pequeños detalles. Tenemos que salir muy concentradas y no tener ningún despiste defensivo porque las jugadoras del Athletic no desaprovecharán la oportunidad que puedan tener».

El choque tendrá un atractivo añadido, ya que los aficionados que se acerquen al Cerro del Espino podrán fotografiarse con el trofeo de la Copa del Mundo, que este fin de semana está en Madrid, dentro de su gira por todos los países clasificados para su disputa el próximo año.

Difícil para los dos

Sea cual sea el resultado del partido, las vizcainas estarán muy atentas a lo que suceda mañana en Zubieta, donde la Real recibe al Barcelona. Y puede que sea el mejor momento para las txuriurdines que, pese al disgusto de última hora frente al Santa Teresa, llevan ya algunas semanas mostrándose como un equipo fiable. También lo es el Barcelona, qué duda cabe, pero como reconocía en GARA Javi Llorens, el equipo culé no está transmitiendo esta temporada unas sensaciones tan óptimas como sus resultados.

Asegura Llorens que espera un choque «difícil» ante un rival que «juega bien en casa y que si sabe aprovechar sus ocasiones, nos pondrá las cosas muy complicadas». Así lo espera Aintzane Encinas, que cree que las blaugranas se aplicarán el mismo mantra del que tira la Real antes de cada partido: «en esta Liga ningún rival es fácil». Por eso considera la capitana txuriurdin que la disposición del equipo no debe variar mañana. «En todos los partidos que vengan intentaremos competir al máximo nivel», asegura Encinas que, pese a admitir que el Barcelona «es siempre un equipo muy complicado, un equipo muy completo y con muy buenas jugadoras», confía en que «tampoco será un partido sencillo para ellas. Intentaremos hacerlo lo mejor posible y plantarles cara como lo hemos hecho últimamente contra ellas».

Las donostiarras realizarán hoy un último entrenamiento, tras el que Unai Gazpio dará a conocer la convocatoria. La Real, por otro lado, informa de que esta vez habrá que pagar (10 euros) para ver el encuentro.