Las bolsas europeas se tomaron de forma distinta las palabras de Mario Draghi a un diario alemán. Según el presidente del BCE, en los últimos seis meses se ha producido un deterioro en el control de la inflación y el impulso del crecimiento. Estas declaraciones son, para muchos expertos, una clara señal de que respalda el programa de compra de deuda soberana. Por tanto, el sí parece rápido, pese a la oposición de Alemania, recordada ayer mismo al hilo de estas revelaciones. Además, los datos de la jornada añaden más presión y pueden acelerar la adopción de esa medida extraordinaria. Según el PMI manufacturero, Italia y el Estado francés siguen en contracción, mientras que Alemania crece de forma mediocre. En el Estado español, la postura de Draghi y los datos macroeconómicos, que acercan esa compra de deuda soberana, empujaron a la prima de riesgo por debajo de los 100 puntos básicos, mientras que la rentabilidad del bono caía por debajo del 1,50%. Bajo este contexto, el Ibex sumó un 0,69%, hasta los 10.350,80 puntos. En la semana, a caballo entre dos ejercicios, se deja un leve 0,12%. En Londres (-0,28%), Fráncfort (-0,42%) y París (-0,48%) se impuso el rojo. Dentro del Ibex, brillaron los grandes saltos de Popular (+6,39%), Sacyr (+6,53%) y Abengoa (+6,60%). Las mayores correcciones correspondieron a Endesa (-2,87%) y Enagás (-1,01%). Entre los pesos pesados, Telefónica (-0,29%) era el peor. En el Cac, Crédit Agricole (+1,30%) y Essilor (-1,81%) ocuparon los extremos de la lista.