Agirre y Gorrotxategi se llevaron el título del Memorial Soroa en la categoría de Primera tras superar en la final a Irribarria, que está a punto de debutar con los pofesionales, y Arratibel, 22-17.

Los colorados creyeron en todo momento en la victoria y eso les dio las txapelas. Cuando perdían 5-13, su experiencia les indicó que nada estaba perdido y había que seguir sufriendo en la cancha. Hasta entonces Irribarria estaba firmando una grandísima exhibición, que no pudo mantener hasta el final del partido.

A pesar de ello, firmó 11 tantos realizados, 4 de ellos de saque. Tras el 5-13, Arratibel, que se había mostrado muy sólido hasta ese momento, empezó a caerse, sin duda debido a la exigencia física del envite. Irribarria comenzó a ver demasiadas pelotas pasando por encima de su cabeza y los colorados empezaron a imponerse definitivamente a la pareja, que demostró ser muy compensada. Gorrotxategi empezó a madurar los tantos como le gusta, ubicando bien los pies en la cancha y dominando con mucha claridad a Arratibel. A la par de ello, Agirre encontró más pelota en el tres y su nivel de acierto en los remates resultó enorme, mostrando un juego de aire fantástico.

Irribarria veía impotente como se le escapaba una final que los colorados habían tenido de cara hasta la mitad de partido.

En Promesas, Laso y Sarasa ganaron por 9-22 a Elordi y Urizar. Los navarros entraron enchufadísimos, con un Laso muy alegre en el juego, muy bien secundado por su zaguero Joseba Sarasa. Enfrente los colorados estuvieron absolutamente tristes, cuajando un partido impropio del gran campeonato que habían realizado hasta la jornada de ayer.

En juveniles, Zubizarreta y Erauskin ganaron 22-21 a Egiguren y Salegi, en el mejor partido de la tarde.