La reacción al alza del miércoles dio paso ayer a una jornada de transición. Esta pausa se sustanció con una una bajada generalizada, aunque pequeña, en todos los índices, excepto Londres, que se vio favorecido por el movimiento en el sector. El interés del Banco Sabadell por TSB era uno de los ingredientes principales en esa agitación. El banco presidido por Josep Oliu controlaría la sexta entidad financiera de Gran Bretaña con 2.400 millones de euros si llegara a un acuerdo en el conjunto de los condiciones ofrecidas. Mientras tanto, sigue adelante la compra de deuda del Banco Central Europeo, que presiona al bono hacia el 1% y la prima de riesgo por debajo de los 90 puntos básicos. La caída de la rentabilidad del bono hacia mínimos históricos es extensible al resto de estados periféricos, pero también a Alemania y el Estado francés. El Ibex bajó un testimonial 0,09%, y hoy comenzará con 11.011,80 puntos. Por su lado, Fráncfort (-0,06%) y París (-0,21%) se descolgaban del máximo histórico y del nivel de los 5.000 puntos, respectivamente. En el Ibex, los inversores castigaron a Sabadell (-6,64%). El banco, que fue suspendido de cotización cerca de dos horas, necesitará una ampliación de capital. OHL (-2,38%) y FCC (-1,16%) le secundaron en la lista de los perdedores. En el otro extremo acabaron Técnicas Reunidas (+2,71%) y Mediaset (+1,95%). De los grandes, solo BBVA (+0,71%) y Santander (+0,50%) ganaron terreno. En París, Bougues (-2,42%) encabezó los recortes, mientras que Gemalto (+3,17%) se anotó el mayor avance.