AT. MADRID 1

B. LEVERKUSEN 0

Los subcampeones pasaron muchos apuros para superar la ronda de octavos ante un Bayer Leverkusen que vendió cara su eliminación. Tuvo que ser en una tanda de penaltis con muchos errores y tras un partido agónico, donde los colchoneros consiguieron meterse en cuartos con mucho esfuerzo y más incertidumbre de la esperada.

Ya desde el principio del choque se vio que los actuales subcampeones no lo iban a tener nada fácil ante un Leverkusen rocoso y correoso, como ya lo demostrase en su estadio. A los de Simeone les costó mucho hilvanar en los inicios, en la línea de lo que le viene sucediendo en Liga, pero tuvo la fortuna de encontrarse con una jugada de estrategia con la que logró igualar la eliminatoria.

Una falta que acabó siendo rechazada por la defensa germana acabó finalmente en las botas de Mario Suárez, quien se sacó un zurdazo que, en su intento de despeje, acabó tocando Toprak para descolocar a su guardameta y convertirse en el 1-0 con el que, a posteriori, se acabó llegando a la prórroga.

Más dominio atlético

Porque en la segunda mitad no se movió el marcador, pese a que los teutones en su primer tramo -fue en el que más intención le pusieron por marcar un gol que hubiese sido casi definitivo- y posteriormente los anfitriones, cuando ya el Leverkusen plegó líneas, intentaron decantar el pase de su lado. Las ocasiones más claras cayeron, en todo caso, de la parte atlética, con una falta de Koke que, tras superar varias cabezas, se marchó fuera por poco y un chut dentro del área de Turan que repelió con seguridad Leno.

La tónica se mantuvo en el tiempo extra, con los locales llevando la iniciativa y disponiendo de lances sueltos -un trallazo de Raúl García y un remate en plancha de Torres-, pero ante un Leverkusen serio y bien plantado atrás. El esfuerzo de los madrileños tuvo su premio en la tanda de penaltis.